Seguridad

Una policía embarazada mató a un motochorro que asaltaba a un chico

Volvía caminando a su casa de Temperley cuando observó que dos motochorros asaltaban a un chico. Pes…

Volvía caminando a su casa de Temperley cuando observó que dos motochorros asaltaban a un chico. Pese a estar de licencia en la Policía de la Ciudad por embarazo, la oficial llevaba consigo su pistola. Y no lo dudó: dio la voz de alto y fue entonces que uno de los delincuentes le apuntó con un arma. Ella disparó. Uno de los ladrones murió y el otro terminó detenido. Todo ocurrió este lunes, alrededor de las 23, en Dinamarca al 3300, en el partido de Lomas de Zamora, en el sur del conurbano bonaerense. La oficial 1° de 28 años, que presta servicio en la División Subterráneos de la Policía de la Ciudad, regresaba a su casa junto a su cuñada. Dinamarca al 3300, en Temperley, donde la mujer policía embarazada impidió el robo a un chico. Recibir La agente, que se encuentra de licencia por embarazo, estaba vestida de civil y portaba su pistola reglamentaria calibre 9 milímetros. Mientras iba hacia su casa de Temperley vio cómo dos delincuentes a bordo de una moto Honda Tornado blanca y negra asaltaban a un chico de 18 años. No contentos con desvalijar al chico, según las fuentes, los motochorros también se le acercaron para robarle. Pero la oficial dio la voz de alto y se identificó como policía. Fue entonces que uno de los asaltantes la apuntó con un arma de fuego. La respuesta de la oficial fueron al menos cinco disparos: uno de los ladrones se desplomó en el piso, junto a la moto, y murió, mientras que su cómplice huyó corriendo del lugar. Tras el llamado de la agente al 911, un móvil de la comisaría 6° de Lomas de Zamora que acudía al alerta se cruzó, a unos 300 metros de donde fue el asalto, con un joven que rengueaba, herido. Había recibido tres disparos en la pierna derecha y otro en un brazo. Según las fuentes, fue identificado por la Policía como Claudio Carlos Gómez (27). Hay versiones que indican que ese delincuente habría sido retenido por los vecinos de la zona, que lo redujeron y le quitaron el arma -que no pudo ser recuperada- para luego entregarlo a los policías que habían llegado en el patrullero. El delincuente muerto aún no pudo ser identificado y, según los médicos policiales que observaron el cadáver en la escena del crimen, tenía siete orificios de bala, sin precisar cuántos eran de entrada y cuántos de salida. El presunto cómplice del ladrón muerto, en tanto, fue detenido y trasladado al Hospital Gandulfo donde, tras pasar unas horas internado, fue dado de alta porque las heridas eran todas superficiales. Ya está a disposición de la Justicia. El caso es investigado por el fiscal Nicolás Espejo, de la UFI N° 7 de Lomas de Zamora, quien ordenó secuestrar el arma de la mujer policía para pericias.

To Top