Fabián Méndez es, hasta ahora, el jefe del Escuadrón de El Bolsón de Gendarmería. No había hablado públicamente de lo que ocurrió en el operativo de desalojo de un piquete mapuche en la ruta 40, en Chubut, después del cual varios testigos aseguran que desapareció el artesano Santiago Maldonado. Su palabra era esperada, principalmente, para saber qué hizo la fuerza a su cargo. Pero, en sus declaraciones al programa Periodismo Para Todos, que conduce Jorge Lanata por eltrece, sorprendió por una acusación grave: afirmó que Gustavo Vera, el diputado porteño que se presenta como "amigo" del papa Francisco, lo llamó para amenazarlo. Y dos veces. - Periodista: ¿Cómo fue el llamado que usted recibió y que lo denunció ante la Justicia? - Fabián Méndez: Me llamó un tal Vera, diciéndome que era muy amigo de Su Santidad, el papa Francisco, que ellos ya sabían todo lo que había pasado, que tenían todos los datos necesarios y que lo único que restaba saber era dónde estaba Santiago. Eso me angustió muchísimo, me puso muy mal. Entonces yo le pedí por favor que -si tenía algún dato- se acercara hasta el juzgado, porque nosotros queremos saber qué es lo que pasó con Santiago. - Periodista: ¿Qué sintió con el llamado de Gustavo Vera? - FM: Sentí angustia. Mucha angustia, porque temía que le haya pasado algo pero, evidentemente, esta persona no tenía nada cierto, me parece, no sé, hasta ahora. Después me llamó una segunda vez el día domingo y directamente le pedí que se comunique con el juzgado. - Periodista: ¿El domingo le dijo algo más? - FM: No. Me llamó un secretario, que quería hablar de parte del señor Vera y yo le dije: mire, no tengo ningún interés, tiene que dirigirse directamente al juzgado y que por favor vaya, porque que alguien pueda aportar alguna novedad, alguna noticia. Pongo las manos en el fuego Además de la acusación contra Gustavo Vera, el gendarme que estaba a cargo de uno los escuadrones que intervinieron en el operativo de desalojo de la ruta 40 fue consultado sobre si "ponía las manos en el fuego" por todos los uniformados que habían actuado el 1 de agosto y su respuesta fue contundente: "Sí, totalmente", respondió.
