Su temporada en ascenso en el West Ham inglés le fue dando el espaldarazo. Le fue haciendo ganar un cupo. Primero entre los 35, más tarde entre los 23, después entre los 11. Quién sabe cuánto lo pudo haber ayudado aquel golazo a Italia en el amistoso de Manchester... Lo cierto es que Manuel Lanzini, a partir de lo evidenciado en los entrenamientos en Cataluña, se había puesto la pechera de los titulares con grandísimas chances de debutar en el Mundial frente a Islandia, dentro de ocho días. Delante de Masche y Meza, a la derecha de Messi y Di María, detrás (posiblemente) de Higuaín. Sin embargo... La noticia caló hondo en Barcelona. Al mediodía de la Ciudad Condal, la AFA informó de manera oficial lo que no se había podido ver en el entrenamiento. El surgido en River, con pasos por Fluminense y al Al Jazira de los Emiratos Arabes Unidos, sufrió este viernes -en la anteúltima práctica antes de viajar a Rusia, al intentar girar en un trabajo con pelota- la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Y no fue, lamentablemente, lo único que se rompió.
