Por primera vez en más de seis décadas, el presidente de Cuba no se llama Castro. Miguel Díaz-Canel fue elegido hoy presidente por la Asamblea Nacional de la isla en sustitución de Raúl Castro, quien se retira del poder tras 12 años al frente del país. El hasta ahora primer vicepresidente del país fue ratificado esta mañana como nuevo presidente del Consejo de Estado de Cuba con los votos de 603 de los 604 diputados , el equivalente al 99, 83 por ciento de los votos de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el Parlamento unicameral cubano que sesiona en La Habana desde ayer. "Compañero Miguel Mario Díaz Canel Bermúdez, desde este instante usted es el nuevo presidente del Consejo de Estados y de ministros de República de Cuba. Invito a usted a la Presidencia". Esa fue la frase que marcó el fin de una era en Cuba: ya no hay un Castro en el poder pic. twitter. com/DHv2ayIwHO "Agradezco a todos la confianza que nos ha sido depositada", dijo Díaz-Canel, un ingeniero de 57 años, tras abrazarse con Raúl Castro. En su primer discurso, se deshizo en elogios para los hermanos Fidel y Raúl Castro y prometió dar continuidad a la revolución cubana y a la actualización del modelo económico que inició su antecesor. Díaz-Canel dedicó así "el primer pensamiento a la Generación Histórica que hizo la revolución" y señaló que "Cuba espera de nosotros que seamos como ellos", en una señal de continuismo a su futura gestión. "Seremos fieles al legado de Fidel Castro, líder histórico de la Revolución y también al ejemplo, valor y enseñanzas de Raúl Castro, líder actual del proceso revolucionario", dijo Miguel Díaz-Canel, insistió al leer su discurso de pie en la tribuna de oradores del parlamento, al que acudió vestido con traje gris y corbata roja. Miguel Díaz-Canel nació un año después del triunfo de la Revolución Cubana que lideró Fidel Castro y es el primer presidente de la Cuba poscastrista: así escoltó a Raúl Castro hacia la salida https://t.co/T2giUNnr5A pic. twitter. com/Jku0N1RgZF "El mandato dado por el pueblo a esta legislatura es dar continuidad a la revolución cubana en un momento histórico crucial, que estará marcado por todo lo que debemos avanzar en la actualización del modelo económico", dijo Díaz-Canel. El nuevo mandatario, sin embargo, destacó que Raúl Castro tendrá un papel fundamental en la nueva etapa. "Reafirmo a esta asamblea que Raúl Castro, como primer secretario del Partido Comunista, encabezará las decisiones de mayor trascendencia para el futuro del país", dijo, validando lo que denuncian muchos opositores, es decir que el cambio de poder es más cosmético que real en la isla. Raúl Castro seguirá siendo hasta 2021 primer secretario del Partido Comunista, una organización que la Constitución de la isla consagra como "fuerza dirigente superior de la sociedad y del Estado". Esto supone por el momento será la persona con más poder en la isla. Su salida de la presidencia es no obstante un momento cargado de simbolismo para un país estuvo bajo el mando absoluto de la familia Castro desde la Revolución Cubana. El primero en asumir el mando fue el líder revolucionario Fidel Castro y, en esta última década, su hermano menor. A cargo de liderar una transición histórica en un primer mandato de cinco años, Díaz -Canel será el primer líder cubano nacido después de la revolución de 1959 y tendrá que forjar una legitimidad que fue natural en los Castro. A Díaz-Canel le tocará lidiar con la administración de Donald Trump, que puso fin al acercamiento de la era Obama. En este sentido, aseguró hoy que la política exterior de la isla se "mantendrá inalterable" y que el país caribeño "no hará concesiones contra su soberanía e independencia" ni "negociará sus principios". Primer vicepresidente desde 2013, Díaz-Canel, un ingeniero electrónico y profesor universitario, escaló discretamente en la línea de mando, respetando los caminos establecidos dentro del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC, único). Raúl, de 86 años, lo trajo a su lado, le encargó representar al gobierno en visitas oficiales al extranjero y lo preparó para asumir el cargo más importante en la isla, mientras la prensa estatal le iba dando más espacio. Recordado por ser un dirigente que andaba en short y bicicleta, supo darse una imagen más fresca y moderna, abogando por el desarrollo de internet y de una prensa más crítica. Sin embargo se mostró severo contra los opositores o los diplomáticos propensos a criticar públicamente al gobierno.
Fin de una era en Cuba: Raúl Castro cedió el mando a Miguel Díaz
Fue elegido presidente de cuba por 603 de los 604 diputados cubanos. Prometió dar continuidad a la revolución y afirmó que Raúl Castro "encabezará las decisiones de mayor trascendencia" en Cuba.