El primer día del 2018 llegó con un motivo extra para festejar en Ecuador: varias tortugas nacieron de forma natural en las Islas Galápagos después de más de un siglo. Para ayudar a la especie, especialistas del Parque Nacional Galápagos (PNG) exterminaron con veneno a las ratas que había en el predio y sacaron a los gavilanes para esquivar la toxicidad. "Las tortugas gigantes no podían nacer de forma natural porque las ratas negras que habitaban la isla Pinzón se comían sus huevos", explicó el director de Ecosistemas, Danny Rueda. Y detalló que en diciembre del 2012 y, tras cinco años de estudios sobre toxicidad, los expertos dispersaron veneno por las 1.789 hectáreas desde un helicóptero. Los roedores también disminuyeron especies como la paloma de Galápagos, lagartijas y culebras. Los estudios previos habían alertado sobre el riesgo que corría el gavilán de Pinzón, ya que podía comerse las ratas muertas. Por eso capturaron a los 12 que encontraron y los mantuvieron vivos durante tres años en la vecina isla Santa Cruz antes de devolverlos a su hábitat natural. Así, el especialista informó a la agencia EFE que en un monitoreo ecológico realizado en diciembre de 2015 lograron detectar "por primera vez, luego de más de 100 años, tortuguitas bebés nacidas en estado natural". Y confirmó que en dos años de control y después de esparcir el veneno no se encontraron ratas en la isla, por lo que en 2014 fue declarada libre de roedores. Se cree que las ratas llegaron a Galápagos con los primeros navegantes (piratas, balleneros) en 1800. En la actualidad, el desafío más grande es evitar que vuelvan a entrar ya que podrían llegar en algún barco. En 1965, el PNG empezó su programa de crianza y cautiverio con las únicas 20 tortugas que había en Pinzón. Desde entonces, repatriaron 837 ejemplares.
Galápagos: nacieron tortugas en las islas después de un siglo
Un equipo de expertos llevó adelante un proceso para exterminar a las ratas negras que se comían los huevos y no dejaban que la especie se reprodujera.