Política

Alberto Fernández desautorizó al embajador argentino ante la OEA que rechazó el informe de la ONU sobre represión ilegal en Venezuela

“Se extralimitó”, reconocieron a TN. com. ar cerca del Presidente. La Cancillería dijo que “no estaba previsto” que Raimundi se expresara de esa forma.

Las palabras de Carlos Raimundi, representante argentino ante la Organización de Estados Americanos (OEA), que el miércoles rechazó el informe de la ONU sobre las violaciones de derechos humanos en Venezuela, no cayeron para nada bien en el presidente Alberto Fernández ni en el Canciller Felipe Solá. El mandatario y el funcionario se mostraron molestos por la exposición de Raimundi en el Consejo Permanente de la OEA al entender que varios de sus conceptos allí no representan la posición de la Argentina respecto a la situación en Venezuela. Entre otras cosas el representante sostuvo que ese país "ha sufrido un fuerte asedio de intervencionismo” y planteó que hay “una apreciación sesgada de lo que son las violaciones a los derechos humanos en determinados países”. “No debía hablar sobre el informe de la ONU, no le corresponde. Se tomó atribuciones que no debía, no cayó nada bien", señalaron fuentes oficiales a TN. com. ar. Tras la exposición de Raimundi, el Secretario de Relaciones Exteriores de la Cancillería Pablo Tettamanti, explicó que “no corresponde a ese organismo tomar una decisión sobre el informe de la Alta Comisionada de la ONU Michelle Bachelet presentado al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas". Y agregó: "Por lo tanto no estaba previsto en modo alguno que hubiese un pronunciamiento. Tampoco era el ámbito para que las delegaciones se pronunciaran sobre ese reporte sino antes que nada reaccionar eventualmente con algún comentario sobre la presentación que se hizo”. En su último informe la Organización de las Naciones Unidas advirtió que este año murieron más de 2000 personas en los barrios pobres. Mientras que en un documento anterior había acusado a Maduro y a sus principales funcionarios de estar vinculados con posibles “crímenes de lesa humanidad”, al presentar un documento que analiza casos de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias y tortura en Venezuela. Raimundi afirmó que la Argentina “no hace una lectura ideológica de los derechos humanos” y que “no son un instrumento para tomar una posición ideológica”. Todo, ante la atenta mirada del Consejo Permanente de la OEA, que monitorea la situación política del régimen chavista de Maduro. El organismo analizó el reciente informe del Alto Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas sobre la violación de derechos humanos en el país caribeño, sobre el que cada país emitirá su opinión en Ginebra la semana que viene. Ante la revolución que causaron estas palabras, la Cancillería aclaró que “la Argentina trabaja activamente en el seguimiento” de los informes de derechos humanos que en estos momentos están siendo considerados en la sede de la ONU en Ginebra. El país, agregaron, sigue con atención la resolución de estos casos, que podrían conocerse entre el 5 y 6 de octubre.

To Top