La Cámara de Importadores y Distribuidores Oficiales de Automotores (Cidoa) advirtió que, si el proyecto de ley de suba del impuesto "al lujo" automotor avanza, más de veinte marcas asociadas podrían levantar sus operaciones en el país. A través de un comunicado oficial, Cidoa pronosticó "imaginables consecuencias para 176 concesionarios, 311 talleres de post venta y 8600 puestos de trabajo directos" en tanto y en cuanto la baja de las alícuotas del impuesto automotor se apruebe. Si el proyecto sale con éxito del Congreso, los vehículos desde $1.300.000 precio mayorista (unos $1.700.000 al público) pagarán un 20 por ciento (tasa efectiva del 25%) y desde $2.400.000 precio mayorista (alrededor de $3.100.000 al público), un 35 por ciento (tasa efectiva del 54%). "Si la pretensión a través del proyecto de ley es estimular la producción nacional e incrementar la recaudación, el resultado real pueden ser menores ventas (por ende, menor producción y recaudación) y un compromiso para la estabilidad laboral", pronosticó Cidoa. Con esta medida, se estima que alrededor del 43 por ciento de los modelos y versiones que actualmente se comercializan en el mercado local quedaría afectado al tributo. No se trataría exclusivamente de autos "de lujo", sino de modelos en otro entonces "populares" o de compras masivas. Cidoa expresó que la importancia de las marcas que agrupa "está dada no solo por el empleo y la tributación, sino también porque su presencia obliga a mantener la oferta actualizada en materia de innovación y avance tecnológico, seguridad activa y pasiva, cuidado ambiental y confort". El vicepresidente de Hyundai Argentina (es una de las marcas de Cidoa), Ernesto Cavicchioli, dijo que "este proyecto es como echar nafta para apagar un incendio" y que "evidentemente, a los que toman estas decisiones no les interesa respetar las condiciones de previsibilidad".
Alertan que más de 20 marcas de autos podrían irse del país si sube el impuesto "al lujo"
La medida pondría en riesgo 8600 puestos de trabajo directos.