Bolivia ha entrado a su cuarta jornada de convulsión social con el cómputo oficial de votos que ya otorga una ventaja a favor de Evo Morales de 10 puntos sobre Carlos Mesa, que le dan al presidente de Bolivia el triunfo en primera vuelta. Pasada la medianoche se confirmó la diferencia y de inmediato comenzaron las reacciones de los opositores al primer mandatario, que han expresado que el fraude que denuncian se ha consumado “entre gallos y medianoche”. Si el miércoles fue un día de pulseada en las calles de los movimientos ciudadanos contrarios a Morales y de los que están a favor, este jueves puede resultar aún peor, ya que es inminente el cierre del cómputo por parte del TSE con el anuncio oficial del entierro del balotaje. A menos de dos puntos del cierre del conteo oficial, interrumpido por disturbios y problemas especialmente en las regiones de Chuquisaca y Potosí, los opositores mantienen un paro indefinido que tiene su mayor fuerza en Santa Cruz, el polo económico de Bolivia, que cumple su segundo día seguido de suspensión de actividades con bloqueos, vigilias y tensiones que causaron ya al menos tres heridos y decenas de detenciones. El presidente del Comité pro Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, ha reiterado que el paro seguirá hasta que se declare la segunda vuelta electoral y que se ha decidido esperar los resultados oficiales y un informe final de la misión de observadores de la OEA para decidir si hay un cabildo en el que se desconocerá a Evo Morales y en el que se proclamará a un nuevo Presidente. Tanto el candidato opositor Carlos Mesa, como el líder cívico Luis Fernando Camacho, como otros dirigentes políticos contrarios a Evo Morales aseguran que hubo fraude. Este jueves el presidente del Comité pro Santa Cruz ha previsto un viaje a La Paz para entregar a los observadores de la OEA una denuncia de “manipulación informática”, que está sustentada por un informe encargado al colegio de ingenieros informáticos. Mayor riesgo de confrontación Para este jueves se ha previsto que los cocaleros arriben a Cochabamba para una concentración en la plaza 14 de Septiembre, en medio de un paro indefinido que se cumple con contundencia por los que exigen una segunda vuelta electoral entre el Presidente y Carlos Mesa. El sector de los productores de coca es uno de los más fieles a Evo Morales y ha emitido una convocatoria que genera temor de enfrentamientos. También en El Alto se ha convocado a una marcha de la Federación de Juntas Vecinales para movilizarse hacia La Paz en defensa del “voto popular", al mediodía. Una multitud de seguidores de Evo Morales se concentró el miércoles en la plaza San Francisco para prometer que defenderán el voto. En otra plaza y zonas de la urbe paceña volvieron a realizarse protestas en contra del Presidente y a favor de una segunda vuelta. Los discursos de los dirigentes han puesto énfasis en la diferenciación y respeto del voto rural, supuestamente favorable ampliamente a Morales. Algunos analistas e incluso Carlos Mesa han opinado que se busca una peligrosa confrontación racial y, sobre todo, entre el campo y las ciudades. En Chuquisaca y Potosí hay paro indefinido. En la primera región se ha previsto incluso para el viernes un cabildo. En Beni y en Pando también hay movilizaciones a favor de la segunda vuelta y en Tarija se realizó una marcha. Tanto Carlos Mesa como el Gobierno aseguran que las movilizaciones de sus seguidores son pacíficas, pero se acusan de instigar a la violencia. En algunas ciudades del exterior, sobre todo de Europa, los residentes bolivianos han llamado a movilizarse este jueves. El miércoles también se dieron a conocer las cartas de renuncias de dos altos funcionarios del Tribunal Electoral de Chuquisaca, por desacuerdos por la forma de realización del conteo. Se suman a la de otra vocal de esa región y a la del vocal del TSE, Antonio Costas. La misión de observadores de la OEA observó en su informe preliminar de las elecciones el debilitamiento institucional del Tribunal Electoral. El Canciller en la OEA Mientras en Bolivia puede agravarse la convulsión social, por el cierre del cómputo que hace temer enfrentamientos, este jueves volverá a sesionar el consejo permanente de la OEA. Asistirán el canciller Diego Pary y el ministro de Justicia, Héctor Arce, para presentar un informe de las elecciones del domingo pasado. En una primera sesión del miércoles, el embajador de Bolivia ante la OEA, Alberto Gonzales, negó que haya fraude en los comicios y justificó la interrupción de la Transmisión Preliminar de los Resultados Electorales cuando estaban la noche del domingo en un 83 por ciento. Esa situación fue la que encendió las protestas que se agavaron cuando se reanudó el lunes en la noche con un llamativo cambio de la tendencia. MÁS SOBRE ESTE TEMA:
