Los ojos de Athos cuando fue rescatado lo decían todo: estaba triste. Al igual que cualquier geronte, los perros asimilan la tristeza de otra manera y el decaimiento físico es muchas veces irreversible al punto de que puede llevarlos a la muerte. "Athos es un golden de 13 años, que su 'familia' ya no quiso tenerlo más", dijo a Infobae Malena Stein, la mujer que apenas supo del caso no dudó en ayudarlo y darle tránsito en su casa. Consultada sobre qué fue lo que pasó, Stein contó que las personas con las que Athos vivía "compraron un departamento nuevo donde 'no permiten animales'". "Hasta les ofrecí pagar el abogado que se ocuparía de todo y todo lo necesario para cubrir gastos médicos ya que su estado a simple vista era terrible. Se notaba al instante el dolor que el animal estaba sintiendo. La dueña no quiso, así que lo estoy teniendo en casa". —¿Cómo supiste del caso de Athos? —El caso me llegó por Twitter. Sigo a la periodista y escritora Valeria Shapira y al verlo… ¡es igual a su Joy! (el perro de Valeria que murió hace pocos meses). Es increíble que mientras algunas personas sufren la partida de su animal y quedan en carne viva, otras los abandonen en su final, de la forma más inmunda y cruel. ¡No pude dejarlo pasar! Decidí intentar ayudarlo en casa. Cómo ayudar a Athos Desde que Malena se hizo cargo de Athos, al perro le hicieron una serie de estudios veterinarios para saber cuál es su estado de salud. "Va a necesitar tomar una medicación para el corazón y tomar Cosequin (3 píldoras por día). Además, necesita hacer tratamiento de fisioterapia dos veces por semana durante el primer tiempo hasta que ya no sienta dolor", contó la rescatista que ya lo llevó a la primera sesión. "Athos también debe comer un alimento especial (Mobility de Royal Canin) que también es muy costoso, por eso estoy intentando conseguir que la marca lo done", se esperanzó. Hasta el momento algunos de sus seguidores en Twitter colaboraron con el alimento, pero aún no es suficiente. —¿Cómo fue la primera sesión de fisioterapia? —Estaba chocho después de la primera sesión. Le calmó tanto el dolor que hasta levantó la pata al orinar ¡por primera vez! —¿Qué es lo que necesita Athos? —Es muy caro todo lo que le hice, lo que falta hacerle, y fisioterapia necesitará más adelante una vez por semana, pero hasta su final. Yo tengo un discapacitado y una tullidita de 15 años, por eso no puedo afrontar toooodos los gastos. Quienes quieran colaborar pueden ayudar donando dinero a la cuenta de la fisioterapeuta o a la del veterinario.
