Carlos Bianchi cumple 70 años y es un dato que no pasará desapercibido para el mundo del fútbol. El Virrey se destacó como futbolista y también como director técnico, con títulos y estadísticas que marcaron una verdadera huella en la historia. Este nuevo aniversario, con un número tan significativo, servirá de excusa para recordarlo una vez más aunque no haga falta un pretexto para volver a traer a la mente aquellas imágenes llenas de emoción. Con la camiseta y el traje característico que usó en Vélez. Con esa presencia inconfundible que supo lucir en Boca. Y siempre rodeado de gloria. El 26 de abril de 1949 nació en una clínica de la Capital Federal. Desde pequeño ayudó a su padre en la venta de periódicos, previo a dar sus pasos iniciales como jugador profesional. Se casó con Margarita, su novia de la adolescencia, y tuvo dos hijos: Mauro y Brenda. Hoy disfruta de sus nietos y la vida en familia, con la tranquilidad y la calma de estar alejado de la pelota. Esa misma que tantas alegrías le dio y a la que tan bien trató. Su debut como futbolista fue el 23 de julio de 1967, en Vélez. Allí se consagró campeón del Nacional 1968 y se convirtió en el máximo goleador de su historia con 206 conquistas. En 1973 fue transferido a Stade de Reims y en 1977 pasó a Paris Saint Germain, donde demostró su efectividad en la red. Después de una etapa no tan fructífera que comenzó en 1979 en Racing de Estrasburgo, regresó a la Argentina en 1981 para vestir nuevamente la camiseta del club de sus amores. Su retiro se dio en 1984, en el primer equipo al que había ido en Francia. Atrás quedaban varios torneos en los que encabezó la tabla de artilleros y también la experiencia de haber defendido los colores de la Selección Argentina. Si su etapa como jugador fue exitosa, se hace difícil calificar su trayectoria como entrenador. Las primeras armas las hizo en la institución en la que colgó sus botines y en 1993 llegó al Fortín para hacerse cargo del plantel. Fue una verdadera revolución para todo Liniers: tres campeonatos locales, una Copa Libertadores, una Copa Intercontinental y una Copa Interamericana. Nadie había conseguido algo similar y por eso no sorprendió la impactante despedida en un José Amalfitani repleto antes de partir a Roma en 1996. En Italia las cosas no le salieron como había planeado y tras una corta travesía en el equipo capitalino recién volvió a la actividad en 1998 para dirigir a Boca. En su primera etapa (hasta 2001) conquistó tres campeonatos locales, dos Copas Libertadores y una Copa Intercontinental. Después de un año sabático regresó en 2003 y en su segundo ciclo, tal como se encargó de repetir a lo largo de su carrera, consiguió algo más importante de lo que había logrado: confirmar. Obtuvo un campeonato local, una Copa Libertadores y una Copa Intercontinental. Ni siquiera su deslucida tercera etapa en 2013 opacó en lo más mínimo la idolatría construida. Por algo es el técnico más ganador de la historia xeneize. En el medio, con el brillo intacto de sus últimas consagraciones, fue otra vez a probar suerte a Europa. Sin embargo, la estadía en Atlético de Madrid en 2005 no le duró mucho. Y la experiencia como manager en el club de La Ribera en 2009, puesto que conocía de su paso por Francia, tampoco cumplió con sus expectativas. Nada de esto le pudo quitar méritos al entrenador con más laurales del fútbol argentino. El único que conquistó cuatro veces América y en tres oportunidades el mundo. Aquel que quedó inmortalizado con sus estatuas en las instituciones a las que cambió para siempre. Por eso en este día tan especial, 70 veces… ¡Felicidades!
Bianchi cumple 70 años – TyC Sports
El Virrey festeja siete décadas de vida. Un goleador extraordinario en su época de futbolista. El director técnico más ganador en la historia de Vélez y Boca. El único en conquistar cuatro veces América y en tres oportunidades el mundo. Hoy más que nunca… ¡Felicidades!