Un día y medio después del robo en la casa de Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz y presidente de la Comisión Provincial de la Memoria, la policía bonaerense detuvo hoy a dos personas y recuperó las pertenencias del referente de derechos humanos, entre las que había algunas de mucho valor sentimental como sus condecoraciones otorgadas en el exterior. Según informaron a LA NACION fuentes de la fuerza de seguridad que comanda Cristian Ritondo, dos hombres fueron detenidos esta madrugada en la localidad bonaerense de Esteban Echeverría. Según el reporte policial, primero fue identificado el vehículo que habían utilizado los ladrones para escapar tras el asalto a la casa de Pérez Esquivel en San Isidro. Luego fue identificado un domicilio -en la calle Necochea y San Francisco, en Esteban Echeverría-, donde dos hombres fueron detenidos. Los presuntos responsables del robo son Sergio Enrique Vázquez, de 35 años, y Rubén Alberto Cuttiz, de 36. Ambos tienen antecedentes penales y recuperaron la libertad hace poco, tras cumplir condenas por robos. En el lugar incautaron un revolver Smith Wesson 22 largo con seis cartuchos, un handy para escuchar frecuencias policiales, dinero en efectivo (pesosy dólares), las condecoraciones que Pérez Esquivel había denunciado como robadas y teléfonos celulares. También recuperaron dos vehículos: un Citroën C3 Air Cross y una camioneta Mercedes Benz. El premio Nobel de la Paz 1980 y presidente de la Comisión Provincial de la Memoria sufrió anteayer una "entradera" en su casa ubicada en el partido bonaerense de San Isidro. El robo fue cometido en la tarde del jueves, poco después de las 15.30, en una propiedad de la calle Héroes de Malvinas al 300 de ese distrito del norte del Gran Buenos Aires. Fuentes policiales informaron que el nieto de Pérez Esquivel, de 18 años, salió a la calle para sacar la basura y fue sorprendido por dos asaltantes que lo obligaron a ingresar a la vivienda y esperaron a que llegaran sus abuelos mientras que un tercero se quedó en la calle de "campana". Tras permanecer unos 45 minutos en la casa -donde maniataron a las víctimas- los ladrones escaparon llevándose unos 4.500 dólares, 3.000 euros, 3.000 pesos, algunas joyas, condecoraciones de Pérez Esquivel y celulares. Pérez Esquivel sostuvo que su vivienda "estaba marcada" ya que el día anterior una mujer quiso entrar aduciendo que iba a comprar una mesa pero que, supuestamente, se había equivocado de dirección.
