En épocas de ajuste, el Gobierno decidió de nuevo poner la mira en el Poder Judicial para reflotar una vieja discusión que viene recargada: al polémico privilegio de los jueces, fiscales y defensores a no pagar el impuesto a las Ganancias se le sumó ahora la intención de recortar las futuras jubilaciones en un 10 por ciento. La iniciativa, que no fue oficializada desde el Ejecutivo pero de la que ya se está hablando en los pasillos, puso en pie de guerra a las agrupaciones de magistrados y también al sindicato, que amenaza con paralizar el funcionamiento de los tribunales frente a un intento de "colonizar la Justicia". Lo curioso es que, de un universo de unos 700 jueces nacionales y federales, hasta ahora solo ocho jueces nacionales pagan el impuesto a las Ganancias –junto a otros 417 empleados y funcionarios- que ingresaron después del 2017 al Poder Judicial y fueron alcanzados por una ley impulsada durante la gestión de Mauricio Macri. Uno de ellos trabaja en el área de la Corte Suprema. En el ámbito del Ministerio Público la recaudación por ese tributo es aún más escasa: ningún fiscal paga el impuesto de los 240 cargos ocupados, según indicaron a Infobae fuentes de la Procuración General de la Nación. Es que la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN) presentó una medida cautelar para que se frene la aplicación de esa ley, que nunca fue reglamentada por la AFIP y Ejecutivo. En noviembre de 2017, el juez en lo contencioso administrativo federal Esteban Furnari hizo lugar a la cautelar hasta que defina la constitucionalidad de la ley 27.346, en una resolución que fue confirmada en marzo por la Sala V de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal. Sin embargo, el Ejecutivo apeló y el tema está bajo la lupa de la Corte Suprema de Justicia. A esa causa piden sumarse la Federación Argentina de la Magistratura (FAM) que nuclea 15.740 jueces del interior, que –según la provincia- pueden llegar a cobrar la mitad del sueldo que un magistrado nacional. Según el presupuesto, la AFIP se pierde recaudar por la exención de ingresos de magistrados y funcionarios del Poder Judicial nacional y provinciales el 0, 06 por ciento del Producto Bruto Interno. En 2016 fue de 4.607 millones de pesos; en 2017 unos 5.759 millones y en 2018 el total de 6.911 millones. A fin del año pasado, el Gobierno pareció haber dado por cerrado el tema del pago de impuesto para los jueces. Pero ahora, en medio del ajuste, volvió a la carga. "Estamos orgullosos de ser el primer gobierno que logró que los jueces paguen paga Ganancias –dijo a Infobae el ministro de Justicia, Germán Garavano-. Nuestra expectativa es que cuando la Corte tenga que revisarlo revoque y todos los nuevos jueces paguen todos". Por las dudas, cuando el ministro habla de "todos", se refiere a los que ingresaron a tribunales de 2017 pero una mirada a futuro permite pensar en "todos-todos". "Hoy no estamos buscando que otros jueces paguen Ganancias. Más adelante la Justicia va a tener un desafío que es tolerar durante varios años a colegas que ganen un 30% menos hasta que se equipare". "Acá no es un tema de impuestos, sino de salarios. La ley lo resolvió de una manera -los nuevos jueces deben pagar- pero lo que nosotros planteamos es que los que están en la carrera judicial no pueden disminuir su salario", respondió la titular de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional, la jueza María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero, ante la consulta de Infobae y añadió: "La sociedad tiene que discutir si quiere jueces que puedan vivir tranquilos con un sueldo acorde a su tarea, con un salario digno para mantener a su familia". Cuánto cobran jueces, fiscales, defensores y empleados En la Justicia federal y nacional hay unos mil cargos de jueces, aunque solo el 30% está vacante. En el ámbito del Ministerio Publico, hay 270 fiscales. Sus sueldos son la envidia de otros sectores. Quizás por eso y porque muchos trabajadores sí están obligados a pagar el impuesto sin excusas, el debate saltó a la sociedad y en la Comisión de Acuerdos del Senado cada vez que desfila un aspirante a juez, le preguntan si los jueces deberían pagar Ganancias. Con maldad, en ámbitos políticos se quejan de que "todos dicen que sí", pero después muchos de ellos están bajo el amparo de la Asociación de Magistrados que busca frenar ese impuesto también para los nuevos jueces. Un juez de primera instancia novato cobra 119 mil pesos. Pero si tiene 10 años de antigüedad gana 162 mil pesos. Un camarista percibe 151 mil pesos, pero con una década de experiencia percibe unos 207 mil pesos. El sueldo de un juez de Casación arranca en 158 mil pesos. Un juez de la Corte percibe de básico 183.601 pesos, pero los adicionales hacen la diferencia y de bolsillo puede percibir unos 286 mil pesos. Es que los magistrados tienen un sueldo básico, pero después se le agregan rubros como la antigüedad o el título (en el caso de los empleados) que permite mejorar notablemente el ingreso inicial. Por ejemplo, un secretario de Cámara (que tiene rango de juez de primera instancia) con muchos años en el Poder Judicial puede estar ganando 200 mil pesos. Y un empleado unos 100 mil, siempre teniendo en cuenta la antigüedad. El puesto más bajo de un trabajador judicial, de básico, arranca en los 32 mil pesos, así que por las escalas fijadas por la AFIP también queda a tiro de tener que pagar el impuesto apenas su sueldo mejore. En las provincias, se vive un escenario diferente. "Cada provincia es una situación distinta con disparidades salariales y en algunas los sueldos de jueces son la mitad que los nacionales. Cerca de 80 mil pesos. Y por eso el tema de Ganancias es una preocupación", señalan a Infobae fuentes de la Federación Argentina de Magistrados. Pagar o no pagar, esa es la cuestión En el Poder Judicial del ámbito nacional, trabajan cerca de 19.400 personas entre empleados, funcionarios y jueces. Se les deduce el impuesto a las Ganancias a solo ocho jueces "nuevos", revelaron a Infobae fuentes judiciales y oficiales. En realidad, se les debería descontar a otros 95 jueces, que llegaron a ese cargo a partir de enero de 2017 pero su situación está dentro del amparo que ahora analiza la Corte. Según las fuentes consultadas para esta nota, los 95 jueces que deberían pagar Ganancia y no lo hacen por el amparo representan cerca de 6 millones de pesos mensuales del impuesto. "La diferencia entre un juez que paga y uno que no puede ser de entre 50 y 60 mil pesos", explicaron a Infobae las fuentes consultadas. Además de a esos ocho jueces, también se les descuenta ese tributo a otros 417 funcionarios del Poder Judicial. Son 1500 las personas que entraron al sistema en 2017 y que quedaron bajo el paraguas del amparo. Según las fuentes consultadas por Infobae, "solo por esas 425 personas (los 8 jueces y los 417 funcionarios) que pagaron el impuesto se recaudaron 4, 7 millones de pesos en 2017 y 15.7 millones en lo que va del 2018". Nada despreciable teniendo en cuenta que el descuento de Ganancias es de un máximo del 35% del sueldo. En el Ministerio Público Fiscal las cosas no son muy distintas: ningún fiscal paga hoy impuesto a las Ganancias. Sí lo pagan un total de 267 empleados y funcionarios sobre una nómina 4.961 personas, entre fiscales, empleados y funcionarios. Desde el 1º de enero de 2017 –cuando empezó a regir la ley– se nombraron 16 fiscales. Dos ya eran fiscales, nueve funcionarios del MPF y cinco vinieron de otros poderes judiciales. Su situación está dentro del amparo y eventualmente podrían pagar Ganancias. Por qué en los tribunales no quieren pagar "El salario no es ganancia", repite ante Infobae Julio Piumato, líder de la Unión de Empleados Judiciales de la Nación. A su criterio, no es un privilegio de su gremio sino una pérdida de los trabajadores de otros sectores que los judiciales no están dispuestos a resignar sin dar batalla. Lo mismo sostiene Díaz Cordero: "Ninguna duda de que hay gente que cobra menos que los jueces. Pero insisto: ¿qué jueces queremos? En rigor nadie debería pagar Ganancias porque el sueldo no es ganancia". Pero, a diferencia de otros trabajadores, los judiciales tienen un as en la manga que hasta ahora ningún Gobierno pudo quebrar: el argumento sobre la intangibilidad de los sueldos de los magistrados, que es defendido desde los tribunales cada vez que el debate se judicializa. La historia se remonta a la década del '30 cuando la Corte Suprema de la Nación abordó la cuestión por primera vez en el caso "Fisco Nacional c. Rodolfo Medina". Integrada por conjueces, el máximo tribunal declaró en 1936 la inconstitucionalidad del impuesto a los réditos en cuanto gravaban el sueldo de los jueces federales. En 1996, con Carlos Menem en la Casa Rosada y Domingo Cavallo en el Ministerio de Economía, el Congreso hizo caer –con la ley 24.63- la exención del impuesto a las Ganancias para los legisladores y jueces. Diputados y Senadores comenzaron a tributar –solo sobre el básico de sus haberes-, pero a los pocos días la Corte Suprema dictó la acordada 20/96 que consideró "inaplicable" esas derogaciones para el mundo de los tribunales y evitó, como cabeza del Poder Judicial, que se efectuaran las retenciones al liquidar los sueldos. Las aguas volvieron a sacudirse con el Gobierno de Cristina Kirchner. En 2007, en su discurso final como senadora y a punto de sentarse en el sillón de Rivadavia, la entonces presidenta electa sostuvo que era "una deuda que tiene la democracia" era que los magistrados aún no paguen Ganancias. Pero en 2014, esa supuesta deuda seguía sin saldarse. En aquel año, cuando se había declarado el intento por "democratizar" la Justicia, Cristina Kirchner dijo al abrir las sesiones ordinarias en el Congreso que "un poquito de control popular no le viene mal a nadie" y llamó a los jueces a "ponerle un poco más de onda" porque "tienen un buen presupuesto, sueldos y siguen sin pagar el impuesto a las Ganancias". A fines de 2016, durante el Gobierno de Mauricio Macri, el Congreso aprobó una ley que estableció que "todos los magistrados, funcionarios y empleados en los poderes judiciales y o del Ministerio Público, tanto de la Nación como de las provincias o de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuya designación hubiera ocurrido a partir del 1° de enero de 2017, estarán alcanzados por el Impuesto a las Ganancias". Los que estaban antes de esa fecha trabajando en los tribunales, están eximidos de tributar. En ese año, el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, sostuvo que en el máximo tribunal están "todos a favor" de que los jueces comiencen a tributar el impuesto a las Ganancias. Pero aclaró que "el problema no es tanto a nivel de los jueces sino con los empleados" del Poder Judicial. Cambios y nervios Esta semana, las versiones sobre una nueva embestida por el pago de Ganancias no vino sola y se viralizaron por los WhastApp de tribunales. Es que los rumores indicaban que el oficialismo también avanzaría sobre un "retoque" a las jubilaciones, un tema mucho más espinoso y con el que se podría recaudar cifras más altas que con Ganancias. Con un régimen especial en donde cada empleado aporta un 12% de su sueldo –no 11% como el resto de los trabajadores-, los hombres y mujeres de la Justicia tienen la posibilidad de retirarse a los 60 años, si tienen 30 años de aporte, con el 82% de los haberes que cobran en actividad. Según datos del Consejo de la Magistratura, un juez retirado puede estar cobrando unos 200 mil pesos de jubilación. "Se la pasan diciendo que los jueces cobran mucho, pero un juez no se hace millonario trabajando –dice Piumato a Infobae-. Habrá habido algunos casos, pero no son todos. Tenemos el caso de Norberto Oyarbide (hoy investigado por enriquecimiento ilícito). El Gobierno le aceptó la renuncia y ahora le estamos pagando todos la jubilación". Hay mucha preocupación entre los jueces. Fue el tema casi excluyente del que se habló el jueves durante las elecciones para que los magistrados eligieran a sus representantes en el Consejo de la Magistratura. Tanto impacto causó que las tres listas que competían para esos cargos salieron con un comunicado conjunto en el que se opusieron al pago del impuesto a las Ganancias. Es que los jueces ya vivieron en otras oportunidades en donde se avanzó sobre ese tributo, pero esta vez perciben que hay algo distinto: la crisis económica. La situación del país hace que cualquier privilegio exacerbe los ánimos del reclamo de la sociedad, que en este tema, creen, apoya al Gobierno. "Si el Gobierno insiste y lo saca, pierde a los tres jueces en el Consejo de la Magistratura", le dijo a Infobae un magistrado que conoce desde adentro la situación. Los jueces son clave para la mayoría que el macrismo tiene en el Consejo. En el oficialismo reconocen que el tema va a generar cortocircuitos. "Rispideces va a haber pero espero que no deteriore la relación", le dijo a Infobae uno de los funcionarios que teje las relaciones con los magistrados. Y expone una relación de necesidad mutua: "Ellos también necesitan poner a su gente. Pueden enojarse con Ganancias pero no van a tirar tanto", señaló. A los jueces les molesta que con Ganancias se hagan otras críticas que consideran injustas: que trabajan seis horas, que tienen un mes y medio de vacaciones y que el servicio que prestan es malo. Los magistrados sostienen que eso es no conocer cómo trabajan realmente y en qué condiciones. Y no se cansan muchos de ellos de aclarar que "Comodoro Py no es toda la Justicia", en referencia al edificio de la Justicia federal donde se tramitan las causas de corrupción, siempre sospechado de connivencia política y ser parte más del problema que de la solución. Al ser consultados, algunos de los magistrados señalan que estarían dispuestos a pagar Ganancias si así se reglamenta, pero no es una batalla que quieran perder. "Yo no tengo problema en pagar, pero sobre el básico, como hacen los legisladores", comentó a Infobae una camarista. El lunes, la Asociación de Magistrados convocó a una reunión extraordinaria para analizar los pasos a seguir. Y el gremio de los judiciales convocó a un paro nacional, con movilización, para este miércoles, en donde reclaman "no al traspaso, no al ajuste, no a la baja salarial y no a la flexibilidad laboral" ¿Qué fue lo que ocurrió para que después de la sanción de la ley de Ganancias ahora el Gobierno redoble la apuesta? En despachos oficiales sostienen que la batalla está entre abogados y contadores. Según reconstruyeron fuentes consultadas por Infobae, "el Ministerio de Economía quiere que todos paguen. Es la necesidad de plata ante la crisis. Pero desde Justicia señalan que eso no es sencillo por cuestiones jurídicas y que siempre que se planteó lo mismo no se pudo avanzar. "Creemos que lo ganamos y no se va a insistir", dicen en Justicia. "Las cosas cambiaron y ahora hay una necesidad de juntar plata. Pero además lo lógico es que paguen todos Ganancias", admiten en el oficialismo. Y también exponen una situación de diferenciación: en un mismo tribunal, en donde los jueces cumple las mismas funciones, puede darse que uno de sus integrantes pague Ganancias y otro no y eso implica una diferencia sustancial de sueldo; o que un secretario cobre más que un juez, pese a que tienen responsabilidades distintas.
Solo ocho jueces nacionales y ningún fiscal pagan el impuesto a las Ganancias
Una vez más, los beneficios impositivos del Poder Judicial -un universo de unos mil funcionarios a nivel nacional y federal- están en la mira oficial. La iniciativa desató una guerra en tribunales. El Ejecutivo busca más recaudación y recorte de privilegios jubilatorios