Jueves 23 de agosto por la noche, y los alrededores del Luna Park están copados por los laliters. Las calles se inundan con fotos de la ídola teen, y todo está preparado para la gran apertura de la gira BRAVA, el flamante trabajo de Lali Espósito, que publicó hace apenas unas semanas. Pero algo cambió desde el Luna anterior, en noviembre del año pasado. Las chicas ya no llevan la cara de su ídola impresa en la remera y también quedaron atrás las vinchas con glitter que les cruzan la frente. Ya muy pocas vienen de la mano con sus padres; más bien están en grupos grandes de amigas. Las fanáticas se hicieron escuchar desde la previa del show. (Foto: Martín Bonetto) Su nuevo uniforme son gorras con tachas, labiales oscuros y buzos extragrandes. Las fanáticas crecieron, y Lali, sin dudas, también. Quince minutos pasados de las nueve, la cantante sale a brillar escena. Literalmente, ya que lleva un body sexy de lentejuelas doradas y una chaqueta con flecos, que también brilla. Con una colita alta y el pelo con un estilo “mojado”, su look se asemeja mucho al de Ariana Grande. “Buenas noches” dice, y enloquece a la audiencia mientras canta OMG, uno de sus nuevos singles. Tanto en la apertura como ense desarrollo, una inmensa pantalla fue protagonista del show que Lali Espósito dio en el Luna Park. (Foto: Martín Bonetto) Más madura, más morocha, más sensual, Lali está más brava que nunca. Estrenando nuevo sonido, su música ahora coquetea con el trap, la electrónica y el reggaetton. Atrás quedo su etapa “Cris Morena”. Ahora suenan A bailar, Histeria, Irresistible y el himno, Soy. Lali cantará más de 30 temas sin respiro, con complejas coreografías diseñadas para cada uno de ellos. Lali interpretando "Soy". (Foto: Martín Bonetto) Pero no está sola. Además de los bailarines, los músicos y los coristas, a la diva pop la acompañan varios artistas internacionales invitados: los venezolanos Mau y Ricky, el brasileño Pablo Vittar y la sensación adolescente Abraham Mateo. Lo más impactante del show es, sin duda, la puesta en escena, que acompaña su cambio de estilo. El escenario está adornado con rosas y calaveras, y en el medio una pantalla led gigante es el complemento perfecto para cada canción. El estadio se tiñe de un color distinto según ocasión: dorado, plateado, rojo, azul, verde... Lali, brillante de pies a cabeza. (Foto: Martín Bonetto) Lali tiene más de 10 cambios de vestuario, y en todos el protagonista es el brillo; tanto cuando viste de pies a cabeza con glitter como cuando usa telas holográficas y vinilicas. Muchos bodys, bucaneras, transparencias y prendas al cuerpo. Poco de la niña que solíamos ver en Chiquititas. De la fiesta de Mil años luz y Asesina, bajamos directo al solo de piano, donde la artista interpreta Reina. El coro del público a los gritos se superpone con su voz. En el fondo, se levantan letras con luces que deletrean su nombre. Yo estuve ahí. Las fans aportaron globos, vinchas y porras a la fiesta, y también agitaron sus pañuelos verdes en reclamo por la despenalización del aborto. (Foto: Martín Bonetto) Los temas son breves, se fusionan unos con otros, la adrenalina está a tope. Después del lento, siguen Único y Vuelve a mí. Luego, una presentación de los bailarines, y enseguida vendrá 100 Grados, uno de los hits más importantes del disco. Casi pegado, Tu revolución, una canción en la que Lali y sus fans agitan sus pañuelos verdes (a favor de la despenalización del aborto) sin parar. Cierra con un clásico: Una Na. Como si fuera parte de la producción del show, los laliters hacen rebotar globos por todo el estadio. Y eso parece ser lo último del show de Lali. Brillo, ritmo, sensualidad y piel: la fórmula del éxito de Lali Espósito, que detonó el Luna Park. (Foto: Martín Bonetto) Pero no. La diva vuelve al escenario con un vestido largo color champagne, para interpretar cuatro canciones en versión acústica, mezclando armónica y voz, con guitarra que la acompaña. Así llegan Tu sonrisa, Cielo salvador, Cree en mí y Del otro lado. “No saben ustedes lo que es para una persona que tiene este sueño, que haya alguien que pague una entrada para verte. Gracias de corazón. Quiero que se vayan flasheados diciendo ‘alto show’”, dice Lali al micrófono y el público enloquece. Como todo buen cierre merece, vuelve la fiesta: Ego, No estoy sola, y Amor es presente. Para el verdadero gran final, la artista se despide con todo, con el hit Tu novia. Vuelan papelitos, ensordecen los gritos, crecen las sonrisas. Y así se va Lali, cantando, bailando y agradeciendo una respuesta impresionante del público porteño. Rosas y calaveras. Como los Guns N' Roses, pero más cerca del reggaeton que del rock. (Foto: Martín Bonetto) El viernes la historia se repite, y la cita es nuevamente en el Luna Park, a las 9 de la noche. Después, la gira la llevará a recorrer más del territorio nacional, hasta llegar a Montevideo en noviembre.
La nueva Lali Espósito hizo explotar el Luna
En la apertura de su nueva gira BRAVA, la cantante explora un nuevo sonido con una producción impactante Jueves 23 de agosto por la noche, y los alrededores del Luna Park están copados por los laliters. Las calles se inundan con fotos de la ídola teen, y todo está preparado para la gran apertura de la gira