Bajo el número de expediente 9608/2018/56, el testimonio de Claudio Uberti es acaso el más sorprendente hasta ahora en la causa por los cuadernos de las coimas. No sólo porque se convirtió en el primer ex funcionario arrepentido y describió escenas obscenas de cómo los Kirchner habrían manejado el dinero de los sobornos, sino que detalló modalidades del matrimonio presidencial desconocidas hasta ahora. Al menos en el nivel que confesó el ex titular del OCCOVI. Clarín reveló días atrás detalles sorprendentes de los maltratos que adjudicó el ex funcionario a Néstor Kirchner. Contó, entre otras cosas, que en una oportunidad el ex presidente se puso furioso y empezó a patear un bolso con coimas, porque en vez de dólares o euros le habían llevado pesos. También reveló que era habitual que les pegue a sus colaboradores a modo de "broma" y hasta cómo despreció en público el hotel que estaba diseñando Cristina, su esposa: lo calificó, según Uberti, como "esa poronga". Pero el ex funcionario -tristemente famoso por haber acompañado en el avión al venezolano Antonini Wilson, descubierto con una valija con 800.000 dólares sin declarar-, avanzó también sobre la personalidad de la ex presidenta. Y la dejó peor parada que a su marido. Con un detalle sensible para la agenda actual: la acusó de maltratar "especialmente a las mujeres". Uberti lo desgranó así, según consta en su "Legajo de arrepentido". Son siete páginas imperdibles. "Quiero aclarar que Cristina tenía un destrato y una forma terrible de interactuar con la gente, no te saludaba, insultaba a sus colaboradoras, especialmente a las mujeres", dijo sobre la actual senadora, que durante sus dos mandatos se victimizó más de una vez denunciando presunta discriminación de género. El ex ministro de Planificación, Julio De Vido y el ex titular del OCCOVI Claudio Uberti, en un acto en 2006. En el testimonio, Uberti vuelve una y otra vez sobre el tema del maltrato K: "Néstor les pegaba a los colaboradores. Encontrarte con ellos personalmente era terrible. Una vez me encontré con ellos en un hotel Westin en Madrid, habíamos viajado oficialmente a un encuentro con empresarios, estaban Daniel Muñoz (el secretario de Kirchner) y Néstor, y entró a una habitación de Rubén Zacarías, de ceremonial y protocolo, y Néstor le dijo a Muñoz: 'A este que no cumplió, dale tres'. Creo que no había entregado a tiempo el periódico o algo así, y Muñoz le dio tres golpes de puños a Rubén Zacarías". Pese a que también cuenta que el ex presidente le dio un "cachetazo" y lo trató de "pelotudo" por su amistad con el empresario Relats, en la comparación laboral de Uberti pierde ella: "Kirchner era un suplicio, (Pero) si con Néstor era imposible trabajar, con Cristina era mucho peor". Quizá por ese maltrato, rencoroso por haber sido echado del Gobierno tras el episodio de la valija, o simplemente para aliviar su situación judicial, Uberti pidió agregar más información en el final de su confesión. Dedicada especialmente a su ex jefa: "Los transportes de dinero se hacían al sur por vía aérea, en bolsos y valijas, y se hacían a la luz del día y a la vista e los que estuvieran en el lugar. No vi dinero pero sí las valijas. Esta cuestión no era ajena (a) la Señora de Kirchner, que presenciaba los transportes".
Claudio Uberti y una confesión incómoda para Cristina Kirchner: "Insultaba especialmente a las mujeres"
Así consta en el testimonio que dio el ex funcionario ante la Justicia como arrepentido. Bajo el número de expediente 9608/2018/56, el testimonio de Claudio Uberti es acaso el más sorprendente hasta ahora en la causa por los cuadernos de las coimas. No sólo porque se convirtió en el primer ex funcionario arrepentido y