Internacionales

Empezó el mega rescate de los 12 chicos atrapados en una cueva de Tailandia

Las autoridades despejaron el lugar y los buzos tácticos ponen a punto los equipos para retirar a los jóvenes de la zona.

Se inició la misión de rescate de los 12 chicos y el entrenador atrapados en las profundidades de una cueva en Tailandia luego de que la marina de ese país detectó una baja considerable del agua en la zona. Las autoridades creen que podría acabarse el oxígeno de los jóvenes y ordenaron despejaron el lugar: hay cinco ambulancias y gran cantidad de equipos médicos. Las bombas lograron bajar el nivel de agua y se abrió una ventana de tres o cuatro días antes de que nuevas tormentas aneguen la salida. Es que de acuerdo al pronóstico del tiempo, una fuerte lluvia tendrá lugar en toda la región, por lo que las autoridades decidieron adelantar el operativo de rescate. El mayor temor de los marinos y equipos de rescate que trabajan en el lugar es que las fuertes lluvias no solo dificulten la salida, sino que hasta incluso inunden el lugar en el que los jóvenes permanecen desde hace 15 días. Otra cuestión que preocupa a los técnicos es la calidad del aire en la cueva: la cantidad de oxígeno bajó en las últimas horas hasta un 15 %, cuando se estima que lo necesario para respirar con "normalidad" es un 21 por ciento. Es por ello que las autoridades decidieron ir en busca de los menores y su profesor. El plan de la marina de Tailandia para rescatar a los pequeños ya está listo. La idea es que cada chico -de entre 11 y 16 años- vaya acompañado por un buceador experimentado a lo largo de los cuatro kilómetros que los separan de la entrada de la caverna. Las condiciones de buceo serán extremas, y los profesiones deberán quitarse el chaleco y llevar el tanque por delante en un pasadizo muy estrecho. Si bien los marinos les enseñaron a los chicos las nociones básicas del buceo, muchos de los jóvenes ni siquiera saben nadar. Hasta ser encontrados por dos buzos ingleses, estuvieron 9 días sin comer y en la oscuridad total. El riesgo de esta misión quedó en evidencia tras la muerte de uno de los buzos voluntarios. El hombre, de 38 años, se quedó sin oxígeno en el camino de vuelta. Las autoridades creen que los buzos tardarán unas 11 horas en llegar hasta la cueva y podrían tardar varias más en traer a los niños. Ruegan que ninguno entre en pánico. Eso podría complicar el cuadro de situación.

To Top