¿Quedará una foto más en el álbum? ¿Habrá una última, en ese lejano y pequeño espacio que todavía queda? Lionel Messi ya tiene cuatro en las Copa del Mundo y acá hacemos un repaso. Un doloroso recuerdo de que tenemos al mejor del mundo y, por diferentes razones, no pudimos sacarle el jugo que sí el Barcelona. Su historia en los Mundiales comenzó en Alemania 2006. Con 18 años, fue el jugador más joven en jugar una Copa con la camiseta de la Selección. Jugó sólo un partido como titular (tres en total) y le hizo un gol a Serbia y Montenegro. Entró sobre el final y anotó el sexto y último de la gran goleada. En cuartos de final, contra el local, no ingresó y la imagen recorrió el planeta. Se quedó sentado y de brazos cruzados en el banco de suplentes. Por eso, a José Pekerman le llovieron críticas. Cuatro años más tarde. en Sudáfrica, se dio quizás el golpe más duro. Al menos, la desilusión más grande. La Pulga llegaba en su mejor momento y, con Maradona en el banco, tenía toda la confianza. Le dio la 10 y le dijo que era su heredero. Ya era el dueño del equipo pero no brilló. No hizo goles, Argentina perdió 4-0 ante Alemania en cuartos de final y Leo se fue solo y cabizbajo luego del abrazo paternal de Maradona. En Brasil 2014 la Selección se sintió en su casa y Lionel por fin demostró en un Mundial que es el mejor del mundo. Al menos en el arranque. En la zona de grupos tradujo su importancia en resultados: goles a Bosnia, Irán y Nigeria. En la zona de llave se fue pinchando, pero la Selección fue un muro impenetrable en defensa hasta la maldita final con Alemania y el gol sobre la hora. A todos nos dolió la foto de la Copa del Mundo esperando y esquivando a Messi, quien la miró como a una novia de la infancia. Fue elegido el mejor del Mundial, pero él mismo dijo que no le interesaba un premio individual. Un golpe que dejaría una cicatriz de por vida. Tras las tres finales perdidas de manera consecutiva (dos de Copa América) y la renuncia temporal del 10, el camino a este Mundial de Rusia fue un Vía crucis. Problemas políticos, dirigenciales, un equipo a la deriva y una llegada a Moscú de milagro: triplete de Messi en la altura de Quito y pasaje asegurado. Ya en la Copa, Messi falló un penal contra Islandia y tocó fondo ante Croacia. Ahí reaccionó, se hizo cargo del equipo ante Nigeria (golazo incluido) y debió rendirse ante la superioridad de Francia. Sin una identidad de juego ni intérpretes capaces de potenciarlo, se apagó y terminó frustado, pero entero. ¿Habrá una última oportunidad?
El uno x uno de sus Mundiales
Se terminó el cuarto Mundial para Messi y repasamos sus cuatro despedidas. ¿Quedará una quinta oportunidad? ¿Quedará una foto más en el álbum? ¿Habrá una última, en ese lejano y pequeño espacio que todavía queda? Lionel Messi ya tiene cuatro en las Copa del Mundo y acá hacemos un repaso. Un doloroso recuerdo