El ex CEO de Cambridge Analytica Alexander Nix admitió este miércoles, durante una audiencia de la Comisión de Asuntos Digitales, Cultura, Medios y Deporte del Parlamento británico, que la compañía "trabajó en Argentina", reconoció que propuso una campaña "anti-Kirchner" pero no reveló para qué cliente fue ideada, y sugirió que el trabajo finalmente no fue realizado. Ante la consulta del presidente de la comisión Damian Collins respecto de quién se trataba el cliente -si era un partido político opositor o el dueño del fondo de inversión de alto riesgo Elliott Management Company, Paul Singer-, el ex ejecutivo se excusó y defendió la privacidad de sus clientes, pero aclaró que Singer no fue su cliente. Si bien el intercambio fue por momentos confuso y con respuestas elusivas, de la grabación se desprende que Cambridge Analytica al menos "diseñó" una campaña contraria al kirchnerismo: Damian Collins: -Obviamente, usted hizo mucho trabajo en el Caribe, pero ¿hizo algún trabajo en Sudámerica? Alexander Nix: -Un poco. DC: -¿Trabajó en Argentina? AN: -Sí, hemos trabajado en Argentina. DC: -¿Para quién fue, en Argentina? AN: -Como dije la última vez, no nos gusta hablar de clientes específicos, simplemente porque hay una confidencialidad con el cliente. DC: -Vi una anotación sobre alguien trabajando en Argentina, que era una campaña anti-kirchnerista. Entonces, estaban trabajando para uno de los partidos opositores o alguien que buscaba cambiar el liderazgo político en Argentina, ¿es correcto eso? AN: -En lo que a mí me concierne, y con lo que podría volver después a usted, no creo que nunca hayamos trabajado en una campaña anti-kirchnerista. DC: -Ok. Solo estoy viendo una nota que alguien compartió conmigo de una reunión del grupo SCL (empresa madre de Cambridge Analytica) del 27 de mayo, donde hay una nota que dice "campaña anti-kirchnerista y presentada al tomador de decisiones, esperando devolución"… AN: -Correcto… DC: -Lo que sugiere que sí presentó una campaña anti-kirchnerista a alguien que podría estar en el mercado para comprar una. AN: -Bueno, no. Eso sugiere que tal vez apunte a hacer ese tipo de campaña. DC: -Claro, una campaña anti-kirchnerista, claro. AN: -Exacto, sí. DC: -Pero para ser claro. Las reuniones giraban alrededor de esa premisa, que era una campaña anti-kirchnerista, entonces estaban trabajando para un partido de la oposición u otra persona interesada en influenciar la política en Argentina, que no estaba apoyando al Gobierno. AN: -Esa sería la apariencia de eso. DC: -¿Alguna vez trabajó para Paul Singer, estaba él financiando algún trabajo suyo en Argentina? AN: -No, nunca trabajé con Paul Singer. DC: -Hay otra pregunta que se supone que tengo que hacer, alguien me dio una copia de una nota que fue preparada, presentada al "tomador de decisiones" en Argentina y habla de la naturaleza del trabajo de SCL y dice "nuestro equipo de gerentes consiste de agentes de seguridad e inteligencia retirados de Israel, EEUU, Reino Unido, España y Rusia". ¿Es ese el caso?, ¿tiene ex-agentes de inteligencia o seguridad rusos trabajando en SCL? AN: -No, ese es absolutamente no es el caso. Nix declaró este miércoles en el Parlamento, donde se investigan las prácticas comerciales desleales y el presunto mal uso de datos personales hechos por Cambridge Analytica, en un clima de tensión. Collins le ofreció a Nix hacer una actualización sobre la situación actual de Cambridge Analytica, pero el ex directivo de la empresa empezó a leer una declaración. En ese momento, Collins lo frenó y le aclaró la seriedad de la situación: "La forma en que esto funciona es que nosotros hacemos preguntas y los testigos las responden". Nix fue acusado de quedarse con u$s 8 millones de Cambridge Analytica antes de su cierre. El ex CEO fue suspendido en marzo por el escándalo de los datos y la empresa anunció su cierre en los primeros días de mayo, pero una investigación descubrió que los fundadores de la compañía crearon una firma igual, pero con otro nombre. Tres meses después de su primera visita, el ex directivo volvió al parlamento británico para responder preguntas sobre el escándalo por el uso indebido de datos de más de 87 millones de usuarios de Facebook. En febrero, había negado que la empresa haya recibido datos de Aleksandr Kogan, el investigador que tuvo acceso a la información de millones de usuarios de Facebook. Sin embargo, ahora reconoció que Cambridge Analytica había recibido datos del académico. "La respuesta a esta pregunta debería haber sido 'sí'", dijo Nix, quien explicó que en la anterior visita creía que le habían preguntado si Cambridge Analytica todavía tenía datos del investigador. Nix también declaró que se había "dejado llevar" y que fue un "tonto" cuando sugirió que la empresa usaba "bellas chicas" para seducir a los políticos. El ex directivo de Cambridge Analytica explicó que los dichos que quedaron grabados en una cámara oculta eran una "mentira" para impresionar a potenciales clientes. La firma de consultoría política está acusada de revisar los datos de Facebook y los utilizó para ayudar a Donald Trump a ganar las elecciones presidenciales de 2016. Las autoridades del Reino Unido también están investigando si los datos de Facebook se utilizaron en el referéndum de Gran Bretaña al abandonar la Unión Europea. La audiencia ante el comité de medios del Parlamento británico duró casi cuatro horas. Casi al mismo tiempo, el matutino británico The Guardian reveló que una directiva de Cambridge Analytica se reunió el 17 de febrero del año pasado con el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, para conversar sobre las elecciones en Estados Unidos celebradas unos meses antes, según consta en los registros de visitantes de Assange en la embajada de Ecuador en Londres, donde está refugiado desde 2012. El periódico cita además documentos enviados al comité de la Cámara de los Comunes que mantiene abierta una investigación sobre la propagación de noticias falsas, así como al comité judicial del Senado de Estados Unidos.
El ex CEO de Cambridge Analytica admitió que planificó una campaña "anti Kirchner" para Argentina
Alexander Nix dijo ante una comisión del Parlamento británico que le presentaron una propuesta a un cliente, pero dio a entender que no llegó a ejecutarla