Empresarios involucrados en la organización del amistoso que la Selección se había comprometido a jugar ante su par de Israel viajan en estas horas hacia la ciudad de Zúrich, Suiza, para pedir ante la FIFA la suspensión internacional de la Asociación Argentina de Fútbol, AFA, por "discriminación religiosa" en el marco de la suspensión del mencionado encuentro que se iba a disputar el próximo sábado en Jerusalém y que se suspendió por el temor de los futbolistas de la Albiceleste ante amenazas de la comunidad palestina. La comitiva que hará el reclamo está encabezada por el empresario Ariel Raber, propietario de la productora israelí Comtec Group (la misma que entre otros evento organiza El Giro de italia), luego de que el empresario se reuniera ayer en Madrid con Claudio Chiqui Tapia, presidente de la AFA, para retomar las negociaciones para llevar a cabo el amistoso. El pedido ante la FIFA para la desafiliación de la Argentina del plano internacional, lo que podría poner en riesgo la participación de los de Jorge Sampaoli en el Mundial de Rusia 2018, se hará mediante la Federación de Fútbol de Israel. La propuesta de la AFA ante el reclamo de la empresa organizadora del amistoso fue la devolución de los 2 millones de dólares que Comtec ya le había pagado a la AFA para el traslado de la delegación nacional hacia Israel y, además, Tapia le ofreció el manejo de las dos fechas FIFA que la Argentina tendrá en noviembre para que esa empresa se quedara con todas las ganancias.
