Más de 40 vecinos participaron hoy como voluntarios de la limpieza final de la Avenida de Mayo y alrededores tras los disturbios ocurridos el viernes último luego de la marcha por Santiago Maldonado. El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, indicó que 2000 personas se anotaron como voluntarias a través de redes sociales. Por cuestiones de logística, sólo se convocó a un número limitado. Elena Molina es jubilada y vecina del Barrio Monte Castro. Le tocó desgrafitar paredes de Avenida de Mayo. "Hace unos años que soy voluntaria. Nos convocaron para ayudar y como la Ciudad es de todos, me sentí comprometida. El viernes a la noche prendí la tele y me encontré con todo esto. La verdad que me dio una impotencia... Me sentí mal como ciudadana, ver cómo dejaron el Cabildo, impresionante. Me gusta estar cerca de los vecinos, lo hago de corazón", aseguró en diálogo con LA NACION. Los edificios históricos afectados ya fueron pintados este fin de semana, y se repusieron contenedores, papeleros y luminarias. Sin embargo, a lo largo de las avenidas de Mayo, Diagonal Sur, 9 de Julio y Belgrano quedaron unos 120 locales y varias fachadas de edificios pintados. Raquel Martínez vive en Balvanera y es ama de casa. Pintó persianas y paredes en Avenida de Mayo, entre Perú y Chacabuco. "Fui porque como ciudadana me gusta que mi ciudad esté limpia y trato de que de alguna manera tomemos conciencia de cuidar lo nuestro", le dijo a LA NACION. Graves incidentes, detenidos y enfrentamientos entre los manifestantes y la policía luego de la marc "Queremos superar rápidamente esta situación de violencia que se generó el viernes", aseguró Rodríguez Larreta, al tiempo que aclaró "fue un grupo minoritario" el que protagonizó los incidentes mientras que "la gran mayoría se manifestó en forma pacífica". "Además, por supuesto acompañamos a la familia de Maldonado en este momento de preocupación y dolor que tiene", sostuvo el jefe de Gobierno. Los incidentes se centraron sobre la Plaza de Mayo (Catedral Metropolitana, antigua Jefatura de Gobierno y el Cabildo de la Ciudad) y sobre los locales que hay a lo largo de la avenida de Mayo. Se rompieron y quemaron contenedores, cestos y papeleros; se pintaron grafitis en los edificios y se destruyeron zócalos, canteros y luminarias. "La policía actuó cuando surgieron las situaciones de violencia, cuando empezaron a tirar piedras y aparecieron con los palos. Siguiendo una premisa que decimos siempre: no vamos a permitir la violencia en la Argentina y en la Ciudad de Buenos Aires", aseguró Rodríguez Larreta.
