Tras un mes de conflicto, el subte porteño sumará este martes otro día de paros y protestas. Las líneas E y H, más el Premetro, no funcionarán durante la hora pico de la mañana y recién brindarán servicio desde el mediodía. Luego, hasta las 14, los metrodelegados levantarán los molinetes en las estaciones cabecera. La semana pasada los trabajadores realizaron el mismo esquema de medidas en las otras cuatro líneas, en días rotativos. La medida de fuerza es para reclamar la reapertura de la negociación paritaria, tras el acuerdo que firmaron el Gobierno porteño y la concesionaria Metrovías con la UTA, el sindicato que tiene la personería gremial de los trabajadores del transporte. Los metrodelegados, que en marzo tuvieron un fallo adverso de la Corte Suprema que les quitó la representación formal, exigen ser parte de la negociación, para conseguir un incremento mayor al 15, 2% en tres cuotas que se firmó. Del otro lado, Metrovías considera que el plan de lucha es “ilegal”, porque ellos llegaron a un acuerdo con el gremio reconocido por la ley. Por eso, empezaron a enviar telegramas de suspensión a los trabajadores que protagonizaron las medidas de fuerza, lo que a su vez llevó a un recrudecimiento de las protestas. Ayer, en Metrovías le explicaron a Clarín: “Se enviaron 114 telegramas. De ellos, 95 son trabajadores con tutela gremial, en esos casos se requerirá una sentencia judicial que habilite la efectiva aplicación de cada suspensión. Las otras 19 suspensiones se aplican inmediatamente: son 13 de 5 días, 5 de 10 días, y una de 15 días”. El conflicto gremial coincide en el tiempo con la pelea que el Gobierno porteño tiene en la Justicia para destrabar el aumento de tarifas. El pasado martes 8, el boleto plano debía subir de $ 7, 50 a $ 11, para luego en junio saltar a $ 12, 5. Pero a último momento, la jueza en lo Contencioso Administrativo Patricia López Vergara suspendió el incremento, por una medida cautelar solicitada por dos legisladores de izquierda y el metrodelegado Claudio Dellecarbonara, que cuestionaron la tarifa técnica sobre la cual se estableció el aumento. Si bien la Ciudad apeló y a la vez aportó más información sobre los subsidios y el cálculo tarifario, la jueza confirmó la semana pasada su decisión, con lo cual también podría demorarse la intención del Gobierno porteño de llevar el boleto de una sola vez a $ 12, 50. En tanto, el jueves pasado la Ciudad inauguró la estación Facultad de Derecho de la línea H. La nueva cabecera norte le aportará a la línea unos 52.000 usuarios, entre vecinos, estudiantes universitarios y los turistas que visitan Recoleta
