Los tres ladrones llegaron caminando y sorprendieron a Carlos Manduca mientras cargaba los diarios en su camioneta utilitaria frente al puesto que había comprado hace dos meses, en la esquina de Bartolomé Mitre y Zanella, Caseros. Quiso evitar que le robaran pero le dispararon por la espalda. Uno de los tiros impactó en su cabeza y lo mató en el acto. "Le dispararon estando en el piso, como cobardes", afirmó Marcelo Manduca en TN. El hermano del canillita asesinado dijo que se había caído al forcejear con uno de los delincuentes, y en ese momento de vulnerabilidad el otro lo fusiló. Los asesinos le robaron la camioneta con los diarios y escaparon. Según trascendió, la policía encontró abandonado el vehículo más tarde en el barrio Ejército de los Andes, en Fuerte Apache, pero los sospechosos siguen prófugos. "Sin mediar palabra me arrebataron la vida de mi hermano", se lamentó Marcelo, quebrado al recordar el dolor de su sobrina de ocho años. "El padre era su vida", remarcó. Manduca tenía 49 años y tenía además otros dos hijos, mayores. Había trabajado en la Policía Federal entre 1994 y 1996 para sumarse después a la tradición de una familia de canillitas y diarieros. "Fue un hecho fortuito, es una locura lo que se vive, hay patrulleros en la calle y hay presencia policial en el municipio, pero justo hacía cinco minutos había pasado uno por donde estaba mi hermano", sostuvo. Seis horas antes, a unas 25 cuadras de distancia, asesinaron a balazos a Manuel Antonio Palacios, un vecino de la localidad de José Ingenieros, cuando llegaba a su casa.
"Le dispararon en el piso, como cobardes", dijo el hermano del canillita asesinado en Caseros
Los ladrones eran tres y escaparon en el vehículo de la víctima. Siguen prófugos.