Una toma de rehenes tiene en vilo al municipio de Trèbes, en la región de Languedoc-Rosellón, departamento de Aude, en el sur de Francia. Una persona se atrincheró en un supermercado de la cadena Super U y fue rodeado por fuerzas de seguridad, según la información que publicó en su cuenta de Twitter la policía local. Se reportaron al menos dos muertos y varios heridos. El fiscal que está a cargo del caso informó que el atacante reivindicó su pertenencia al Estado Islámico (ISIS). Por el momento, no está confirmado el número de rehenes. El primer ministro, Édouard Philippe, está viajando al lugar para seguir de cerca los sucesos. "Es una situación seria (…) Toda la información que tenemos indica que se trata de un acto terrorista", dijo. Gerard Collomb, ministro de Interior, comunicó que también se está dirigiendo a la escena. El terrorista ingresó armado al supermercado a las 11.15 locales (10.15 GMT). Según algunos testigos, lo hizo al grito de "Allahu Akbar". Inmediatamente después se escucharon disparos. El Ministerio de Interior aseguró que "la operación está en desarrollo", y se abstuvo de dar un balance oficial sobre las víctimas. La sección antiterrorista de la Fiscalía de París ya está en la zona para hacerse cargo de la investigación. "Gran parte de los empleados y clientes del Super U lograron darse a la fuga. Un oficial de gendarmería de servicio está actualmente en contacto con el atacante", dijo a AFP una fuente de seguridad. Más temprano, en Carcassone, a unos ocho kilómetros de Trèbes, cuatro policías que hacían ejercicio al costado de una carretera fueron atacados desde un automóvil. Al menos uno de ellos resultó herido de un balazo y fue trasladado a un hospital. Por el momento, las autoridades francesas no confirmaron si hay un vínculo entre la toma de rehenes en el supermercado y el tiroteo. Sin embargo, hay testigos que aseguraron que el autor de los disparos se fue en su automóvil rumbo a Trèbes.
