El jueves que viene no será un día más para Matías Bagnato. A partir de las 11 de la mañana le tocará estar nuevamente frente a Fructuoso Alvarez González, condenado por asesinar a toda su familia. Bagnato fue convocado para declarar en una audiencia que definirá el futuro del múltiple homicida, quien pidió ser expulsado de Argentina y regresar a España, su país natal. La inclusión de una víctima en esta instancia judicial es un mecanismo incorporado por una ley sancionada en agosto del año pasado que establece distintos mecanismos de protección para quienes sufrieron un delito. "Con la ley de protección de las víctimas tenemos participación en este proceso. Hasta ahora no teníamos ninguna voz. Logramos que ahora se escuche a las víctimas. Por lo que tengo entendido, el mío es el primer caso en el que ya se aplica la nueva reglamentación", explicó Bagnato a Clarín. Aunque los jueces de la Sala I de la Cámara de Casación escucharán sus argumentos, la víctima no tendrá la posibilidad de apelar la decisión. Durante la audiencia también presentarán sus argumentos a favor y en contra los fiscales Guillermina García Padín y Diego García Yomha, y el propio Fructuoso Alvarez González. Aunque Bagnato hizo un pedido especial para no cruzarse con el hombre que mató a toda su familia, aún no se definió si ambos deberán convivir en la sala. A 24 años de un caso conmocionante Fructuoso Alvarez González fue condenado a perpetua por lo que se conoció como la Masacre de Flores, ocurrida el 17 de febrero de 1994. Esa noche, el hombre incendió la vivienda de la familia Bagnato -al parecer por una supuesta deuda- y asesinó a José Bagnato (42), su mujer, Alicia (40), sus hijos Fernando (14) y Alejandro (9) y a un amigo de los chicos, Nicolás Borda (11), que se había quedado a dormir con ellos. Matías fue el único que puso salir con vida de la casa en llamas. Su calvario estuvo lejos de terminar esa noche trágica. En 2004, el condenado logró que le permitieran terminar de cumplir la pena en España. Sin embargo, en su país lo dejaron libre cuatro años después, por un error de cómputo. A los pocos días de salir de la cárcel, el múltiple homicida regresó a Argentina y amenazó a Bagnato. En julio de 2011, el juez de Ejecución argentino Axel López ordenó la recaptura de Alvarez González, tras descubrir las irregularidades en su liberación. Ley de extrañamiento El año pasado, Fructuoso Alvarez González pidió acceder al beneficio de las salidas transitorias. El juez de Ejecución José Pérez Arias le negó la solicitud. Se basó en informes psiquiátricos que indicaban que no mostraba signos de arrepentimiento. Tras ese revés, el condenado volvió a la carga: pidió ser beneficiado con la ley de extrañamiento, una normativa que le permite a los extranjeros regresar a su país al cumplir la mitad de la pena. A esa misma figura jurídica apeló Luis Vitette Sellanes, uno de los autores de "El Robo del Siglo", quien se fue a vivir a Uruguay. Aunque cumplía con los requisitos, el juez se opuso, al considerar los antecedentes del condenado. "Tomó en cuenta que en su anterior liberación volvió de España y lo primero que hizo fue amenazarme a mí y a mi abuela", explicó Bagnato. La negativa de Pérez Arias fue apelada por la defensa de Alvarez González y por eso ahora debe fallar Casación. La Sala I, integrada por Luis Miño, Gustavo Bruzzone y María Laura Garrigós de Rébori, escuchará a las partes antes de tomar una decisión. En el caso de acogerse a la ley de extrañamiento, el condenado no podrá regresar a Argentina, aunque nada impide que se vaya a vivir a un país limítrofe. Ese es el miedo de Bagnato. "Todos sabemos cómo son nuestras fronteras. Quién me puede garantizar que no va entrar por algún lado. Está claro que tiene una obsesión por terminar con mi vida y la de mi abuela", advirtió.
Matías Bagnato declarará frente al asesino de toda su familia para evitar que lo liberen
Fructuoso Alvarez González pidió ser expulsado del país. Una nueva ley le permite a la víctima opinar frente a los jueces.