El presidente Mauricio Macri se manifestó en desacuerdo con el fallo de la Cámara del Crimen que confirmó la condena por homicidio del policía Luis Chocobar y ensayó una compleja categoría de ciudadanía al indicar que "la mayoría de los argentinos" creen que la Policía "deben cuidarnos a nosotros y no a los asesinos y delincuentes". En ese sentido, Macri volvió a respaldar la "nueva doctrina" de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y confió en que para que las fuerzas de seguridad "nos puedan cuidar, le tenemos que dar las herramientas para que puedan actuar". El mandatario repitió las críticas que más temprano ensayó la ministra Bullrich y lamentó que los camaristas hayan analizado que el accionar de Chocobar "estuvo bien hasta el último instante en que los jueces dicen que se excedió". "Estamos hablando de que el policía perseguía a un asesino", exclamó el presidente contra el fallo de los camaristas, en el que ordenaron encontrar un límite al uso de la fuerza policial. Los camaristas advirtieron sobre el excesos de la fuerza de Chocobar contra el Pablo Kukoc, adolescente que fue abatido de espaldas luego de participar junto a otro ladrón del robo al turista estadounidense Frank Wolek, quien sobrevivió a diez puñaladas. Macri dijo respetar la independencia judicial, pero pidió que los tribunales superiores "entiendan que si un policía dice deténgase, se tiene que detener" en busca de reforzar la idea de "presunción de inocencia" que reclama el Gobierno. "Si ese policía hace algo mal habrá instancias donde podemos investigar si hizo las cosas bien", agregó confusamente Macri, sin precisar, luego de dos fallos en contra de Chocobar, qué organismo debería hacerlo. "No podemos poner en prisión domiciliaria a todos los ciudadanos por no poder contener a un pequeña minoría que no vive de acuerdo a la ley", insistió el presidente ante de pedir a las cámaras de alzada que modifiquen el fallo en favor de la actuación policial, sin contemplar en ningún momento el exceso del uso de la fuerza cometido por Chocobar al que consideró por parte de los jueces casi como un capricho de "decir que tuvo que hacer algo más". ZAFFARONI El mandatario también aprovechó una pregunta para cargar no solo contra los jueces de la Cámara del Crimen sino también insistir en la pelea de la Casa Rosada con el ex juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni y reforzar la "nueva doctrina" que autoriza los excesos policiales y crea dos categorías de ciudadanía: "Seguro que Zaffaroni los llamó para felicitarnos, pero la mayoría de los argentinos no pensamos como Zaffaroni y creemos que la Policía nos tiene que cuidar a nosotros y no a los asesinos o los delincuentes". Respecto de Zaffaroni, el jefe de Gabinete Marcos Peña recordó el pedido del Ministerio de Justicia Germán Garavano para recusarlo frente a inminente causas que deber resolver el actual juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, aunque señaló que sería para casos en los que la Argentina está involucrado, algo sobre lo que Zaffaroni no tiene poder de opinión. Además, Peña indicó que la Cancillería envió a la OEA una carta para expresar la "preocupación" de que continúe en esa alto cargo después de los dichos contrarios a la gestión de Cambiemos. "Si tuviera dignidad tiene que dar un paso al costado y ser candidato por el Frente para la Victoria", sentenció el jefe de Gabinete. PARITARIAS Ante la consulta sobre el techo del 15 por ciento de las paritarias que intenta imponer el Gobierno, Macri evitó defender esa cifra o avalar una suba ante el rechazo anticipado de varios sindicatos y señaló que "cada sector tiene que discutir de acuerdo a sus posibilidades", mientras que en las paritarias estatales indicó que "dependerá de la capacidad de cada distrito para afrontar un aumento, de acuerdo al equilibrio fiscal buscado para no tener que seguir endeudándonos con el mundo como lo estamos haciendo". Macri no sólo cargó el endeudamiento internacional a la puja salarial sino que también ligó los posibles aumentos paritarios al "compromiso de combatir la inflación", que volvió a describir como el "flagelo que afecta a los que menos tienen, centralmente, a los trabajadores". "SOMOS TRANSPARENTES" En cuanto a las nuevas causas judiciales por empresas off shore e incompatibilidades con la función pública que involucran al ministro de Finanzas, Luis Caputo; al subsecretario general de Presidencia, Valentín Díaz Gilligan; y una de las hermas del ministro de Trabajo, Jorge Triaca, el presidente optó por pedir un "apego absoluto a la transparencia", sobre la que se puso como ejemplo, y prometió que se entregará toda la información al Poder Judicial, además de resaltar la investigación "independiente" que realizará la Oficina Anticorrupción, encabezada por la exdiputada del PRO Laura Alonso. Macri defendió a sus funcionarios y confió en que la Justicia determinará que se trata de "denuncias falsas" que "a medida que fluyan las explicaciones como corresponde" van a "ir desapareciendo". El mandatario también contó que le pidió a su Gabinete dejar de lado "pequeñeces y disputas" para poder responder las necesidades sociales pendientes y prometió que 2018 será "un año bueno para los argentinos" en el que continuarán con el "mandato de cambio" que recibimos en 2015 y otra vez en 2017. En cuanto al conjunto de políticas impulsadas durante su gestión Macri dijo que son solo "una expresión de lo que ustedes eligieron" y cerró: "Los que no estén de acuerdo, dentro de dos años se presentan y la gente va a volver a decidir cuál es el camino a recorrer".
"No entiendo cómo los jueces dicen que se excedió"
El Presidente cuestionó a los camaristas que hoy confirmaron el procesamiento del policía que asesinó por la espalda a un joven que había cometido un delito. Dijo que "si un policía dice ‘deténgase’, uno se tiene que detener" y que las fuerzas de seguridad "deben cuidarnos a nosotros y no a los asesinos y los delincuentes".