"En estas circunstancias Cristina Kirchner ha tenido un gesto bastante inhumano hacia conmigo, hacia con mi familia… Somos muchos en la familia y nos conocemos de toda la vida… Me extrañó el gesto que tuvo". Con esas palabras Alessandra Minnicelli, la esposa del ex ministro Julio De Vido, se refirió a la actitud que adoptó la ex Presidente en las últimas semanas cuando la Justicia pidió el desafuero de su marido y avanzó con la detención. El "gesto inhumano" al que alude la mujer de uno de los funcionarios más poderosos de los 12 años de kirchnerismo es una frase que pronunció la ex mandataria en medio de la campaña electoral para las elecciones legislativas. "Yo no pongo las manos en el fuego por nadie", dijo CFK cuando le preguntaron por la situación procesal de su ex colaborador. "¿Siente que su marido fue abandonado políticamente?", preguntó Luis Novaresio en radio La Red. Y Minnicelli contestó: "Sí, sin dudas, claro". "Es una lectura que todos hacen fácilmente; si un conductor de un partido dice algo como 'no pongo las manos en el fuego por' y de golpe todo el mundo se alinea en ese sentido después de haber tenido 16 votos a favor cuando lo persiguieron la última vez con el tema de los fueros", desarrolló. Y continuó: "Cuando de golpe le preguntan al conductor del espacio político qué piensa de Julio De Vido y en vez de decir que 'lo están persiguiendo mediáticamente y políticamente como a mí', dice 'yo no pongo las manos en el fuego por nadie', ¿qué hace todo el resto? Se repliega por temor". Minnicelli habló por teléfono con Cristina Kirchner por última vez a principios de octubre. Después no hubo más contactos. En el medio pasaron las elecciones, el desafuero de su marido y la detención. Según contó, De Vido pasa sus horas en el penal de Marcos Paz haciendo ejercicios que le recomendaron los médicos como parte de su tratamiento contra la diabetes. Dice que está bien de salud pero que no puede comer lo que debería o llevar un control más estricto de sus niveles de insulina en sangre. Pese al desaire de la "conductora", otros integrantes del kirchnerismo y de otros partidos políticos la llamaron en las últimas semanas para apoyar a su familia. Cuando a Minnicelli le preguntan por las causas judiciales que tienen a su marido procesado, contesta: "Tengo la impresión de que no hay ninguna irregularidad administrativa y por ende no hay ningún delito penal. Los delitos que le pretenden atribuir no son tales; es un armado mediático, es lo que sentí todos estos años". La abogada y también ex funcionaria –formó parte de la SIGEN- aseguró que muchas de las denuncias que enfrenta De Vido son parte de "una construcción" que comenzó con la llegada de Néstor Kirchner al poder, en 2003, y que le hubiera gustado que su esposo contestara más enérgicamente. "Nos empezaron a marcar como si fuésemos ladrones, como si fuésemos Alí Babá y los 40 ladrones", graficó. Minnicelli dijo además que su familia "no es de fortuna" y que si bien le dio tristeza ver "los bolsos de López", aclaró que muchas de las cosas que se dijeron nunca fueron mostradas por los diarios. "Yo no lo vi revoleando bolsos, nunca salió eso, lo único que mostraron fueron valijas llenas de dinero", analizó. "Ese dinero debe haber venido de una coima o se la dieron por el camino, no lo sé. La imagen me pareció terrible. Es muy dañina para todo el colectivo kirchnerista. Me preguntaron pila de veces por la obra pública y mi marido nunca firmó un contrato de Lázaro Báez porque esa no era su función; eso cuesta entender", completó.
Habló la esposa de Julio De Vido: "Cristina Kirchner tuvo un gesto inhumano con nuestra familia"
Alessandra Minnicelli cuestionó la actitud que adoptó la ex Presidente cuando la Justicia pidió el desafuero de su marido. "Me hubiera gustado que Julio contestara cosas que nunca contestó", declaró