Frente a mil empresarios que colmaron la capacidad del auditorio del 53º Coloquio de IDEA, en Mar del Plata, Mauricio Macri pidió "alejarse del escepticismo y del pesimismo crónico para hacer las cosas que llegó la hora de hacer". El jefe de Estado dijo que buscan descalificarlo cuando dice que lidera un país para ricos. "Desde que empezó en Boca y cuando fui a la Ciudad era lo mismo, que nos íbamos a ocupar solo del sur. Pero no fue así", sostuvo. También se refirió a uno de sus caballitos de batalla discursivos: el círculo rojo. "Cuanto más grande ese el círculo rojo, más potente es el país", sostuvo. El Presidente habló, como dos días antes lo había hecho María Eugenia Vidal, sentado en un sillón, dispuesto tipo living, en el centro del escenario, sin atril ni tarimas y en formato de entrevista, de la que participaron el presidente de IDEA y el titular del Coloquio. La presencia de Macri estuvo envuelta en un fuerte operativo de seguridad a raíz de la agresión a huevazos que horas antes había sufrido en La Pampa. Incluso los acreditados al Coloquio fueron advertidos horas antes de su llegada que aquel que salía del hotel iba a tener dificultades para volver a ingresar. La zona aledaña al Sheraton estuvo interrumpida al tránsito y copada por policías locales, de la Bonaerense e incluso por agentes de seguridad privada. Y Macri tuvo una actividad previa en la ciudad, de la que fue imposible tener noticias. Sus colaboradores se negaron a decir dónde y con quién tenía previsto verse. Antes de la exposición presidencial, una mesa de legisladores de peso en el oficialismo y la la oposición, coordinada por el periodista Marcelo Longobardi, había debatido sobre la necesidad de fomentar el diálogo después del domingo 22 para pensar en reformas de largo plazo. Música para los oídos macristas. El peronista Diego Bossio habló de que el país debe abordar "una transformación profunda" para saldar "las deudas pendientes y las trampas de la pobreza". Graciela Camaño, que llegó a Mar del Plata en nombre de Sergio Massa, agregó que la administración kirchnerista "dejó la vara muy baja", y que el actual tiene la obligación de "generar consensos sociales y políticos para evitar un país pendular". Pero fue Miguel Angel Pichetto, el jefe de la bancada del PJ en el Senado, el que pareció acelerar más fuerte. "Tenemos que encontrar un camino para salir de la brecha y escapar de la antinomia y la radicalización de las minorías sin votos pero que controlan la calle. Apoyó las iniciativas para coordinar distintas reformas, impulsó el diálogo económico y social y fue mas allá: habló de encarar una reforma policial. "Es central para mejorar la calidad de vida de los argentinos, especialmente en el Conurbano profundo, que es muy parecido a Sinaloa: manda el narco y la Policía tiene connivencia".
Mauricio Macri en Idea: "Cuanto más grande es el círculo rojo, más potente es el país"
El Presidente pidió "alejarse del escepticismo y del pesimismo crónico".