"Cuando lo crucé en los pasillos no lo podía creer: ¿Qué hace este acá? ¿Si el fin de semana estaba en Lima celebrando el casamiento de su papá?" La angustiada voz corresponde a un magistrado federal que este martes acudió a su despacho en el edificio de Comodoro Py. Su desconcierto -en verdad habló de enojo- tenía como destinatario a su colega Daniel Rafecas, titular del juzgado 3 y candidato oficialista a la Procuración General de la Nación. Los primeros murmullos habían llegado el lunes, primer día de trabajo en los juzgados federales luego de las fuertes restricciones dispuestas por el presidente en su conferencia de prensa del domingo, que fueron replicadas por la Corte Suprema de Justicia al día siguiente, con una acordada en la que se redujo al mínimo la actividad de los juzgados. Pero el martes la sorpresa era total entre los pocos jueces, fiscales y secretarios que fueron a trabajar al edificio, justamente para cumplir con aquellas directivas del máximo tribunal. Es que Rafecas había tomado licencia la semana pasada para asistir al casamiento de su padre en Lima, desde donde posteó fotos y reflexiones en su cuenta de Instagram. "Asistimos a la boda de mi viejo, Jaime, con Silvia, su compañera de los últimos siete años. Junto a Marisa y Mariano Rafecas honramos la unión y le deseamos todo lo mejor!!! Que viva el amor", escribió el juez como epígrafe de las fotos del casamiento celebrado en la tradicional Hacienda Mamacoma de Lima. La alegría de Rafecas -cuyo pliego para la procuración ingresó al Senado la semana pasada- fue compartida por sus compañeros jueces y fiscales de Comodoro Py, aunque al menos varios de ellos no esperaban cruzarse con él en el edificio de Retiro. "Me sorprendió que viniese, él anduvo afuera, estuvo en aeropuertos, y encima el de Lima es hub para varias aerolíneas que vuelan hacia la costa oeste de Estados Unidos, tiene un tráfico infernal", dice a Clarín un fiscal que no parecía tan preocupado. "Pero Lima no es una zona de riesgo", aclararon cerca del juez. "El vino a trabajar el lunes y martes en su auto, se encerró en su despacho, no vio a nadie. Su sentido de la responsabilidad es total", subrayaron en su entorno. El mismo martes por la mañana, el presidente Alberto Fernández había dialogado por radio con un turista argentino varado en Cusco, quien describió una situación delicada en la patria inca: "Acá no podemos salir a la calle, está lleno de milicos y policías por todos lados; ayer a unos argentinos que salieron por Lima casi los meten presos. Nosotros no podemos salir, nos abastecimos con alimentos y nos quedamos unos días acá encerrados en el hostel. No sabíamos que hacer ni a quién llamar", contó el viajero. "La situación es que es muy compleja", le respondió el presidente. "Tenés que entender que pasa eso en todos lados, hay países que han declarado el toque de queda para que la gente no salga a la calle. Nosotros no hemos llegado a eso porque confiamos en nuestros ciudadanos. Estamos detectando los contingentes de argentinos varados que no pueden volver. Quedate tranquilo que los vamos a ir a buscar", lo tranquilizó. Si bien Perú no está hasta ahora en la lista de países de riesgo, la indicación oficial es que todos los argentinos intenten quedarse en sus casas, y que trabajen desde allí. Esa prescripción es mucho más severa para quienes viajaron al exterior en las últimas semanas. COMENTARIOS Comentarios CARGANDO COMENTARIOS Para comentar debés activar tu cuenta haciendo clic en el e-mail que te enviamos a la casilla ¿No encontraste el e-mail? Hace clic acá y te lo volvemos a enviar. Para comentar nuestras notas por favor completá los siguientes datos.
Desconcierto en Comodoro Py: El juez Rafecas volvió de Perú y fue a tribunales
El magistrado asistió en Lima al casamiento de su padre, y no guardó cuarentena. En su entorno dicen que "esa no es zona de riesgo", y que él "es muy responsable".