Tal vez Nicolás Maduro Moros no se enteró de la fuerte crítica que entonces recibió Hugo Chávez Frías, en la Fuerza Armada Nacional, por el uso del uniforme de Comandante en Jefe como rango militar, en su febril ansiedad por sentirse plenamente parte de la FANB. Ayer, en el balance del ejercicio Escudo Bolivariano 2020, Maduro se presentó con la chaqueta de esa vestimenta. Ese es uno de los aspectos que menos se han cuidado en la institución castrense. No solo es que Chávez sustituyó el concepto que, hasta ese momento, había caracterizado a la figura de Comandante en Jefe de la Fuerza Armada, dándole grado militar, de manera que así también lo convertía en militar activo. Recordemos que el máximo grado militar al que llegó Chávez fue al de Teniente Coronel cuando intentó el golpe de Estado contra Carlos Andrés Pérez. Cuando llega a la presidencia de la República, por voto popular, automáticamente se convierte en Comandante en Jefe de la Fuerza Armada, como antes lo fueron los otros primeros mandatarios, incluso Pérez, Jaime Lusinchi, Rafael Caldera y todos los demás. Pero él no se conformaba, quería más poder militar y diferenciarse de sus antecesores. Varias veces Chávez en la presidencia jugueteó con usar uniforme, lo que no era bien visto en la Fuerza Armada, porque ya era un militar retirado y uniformarse a quienes ya no están activos solo les estaba permitido en algunos momentos excepcionales. Aunque nadie se atreviera a contradecirlo, Chávez percibía que usar el uniforme con las insignias que fuera, con boina o sin ella, de un color u otro, no era bien visto. Seguramente le dio tantas vueltas al asunto hasta que se habrá dado cuenta que si no podía inventar un uniforme que fuera aceptado como él quería, tenía la opción de darle grado militar al cargo. Y así convirtió al Presidente de la República en un militar activo con grado de Comandante en Jefe de la FANB. La decisión fue aceptada a regañadientes en la institución castrense, porque no hubo un solo oficial que le indicara lo inapropiado de uniformarse. En los meses en los que le detectaron el cáncer se le vio usar el uniforme con más frecuencia, quizá porque se sentía más cómodo con él. Lamentablemente eso también trajo consigo cierto relajo con el uso de los uniformes. Chávez cambió el color y los anexos de algunos de ellos. Eso ha llevado a que el almirante en jefe Remigio Ceballos Ichaso, comandante Estratégico Operacional (Ceofanb), combine el uniforme militar con franela negra porque supone que así demuestra ser un Comando del Mar, lo que por cierto no es, porque no se preparó para ello. A nivel de tropa la situación es más dramática aún, porque la mayoría de las veces no les suministran los uniformes necesarios, por lo que deben optar por usar algunos a los cuales se les nota la pérdida del color o el deterioro de la tela. Se acabaron aquellos tiempos en los que lucían impecables. El traje no hace monje Alguien le hizo creer equivocadamente a Maduro que era apropiado, para recibir el balance de los ejercicios militares, el uso del uniforme de comandante en jefe que inventó Chávez. Mal consejo. En estos momentos en que la situación en la FANB es muy sensible, cuando enfrenta los mayores problemas que haya vivido, azotada por miles de deserciones, con la imposibilidad de cubrir la alimentación y el vestuario de su ejército, agregarle mayor ruido con el uso de ese uniforme resultaba innecesario. Repetir más de una vez, ante aquellos generales y almirantes del Alto Mando Militar Ampliado, que es el Comandante en Jefe de la Fuerza Armada, e incluso llegar a decir que es el “Comandante en Jefe constitucional”, no tiene relevancia alguna, porque en la institución castrense la jefatura no es un problema de cargos sino de liderazgo y más aun de ascendencia. Entre los discursos de algunos de los jefes de REDI, quienes presentaron el balance, sin duda que el más destacado resultó ser el del Mayor General Domingo Antonio Hernández Larez, comandante de la Región de Defensa Integral (REDI) Capital, quien destacó por el espíritu de soldado. Se diferenció bastante de la destemplada intervención, con carga ideológica política, del MG Ovidio de Jesús Delgado Ramírez. También el discurso del ministro de la Defensa, GJ Vladimir Padrino López, aunque con una carga bastante política, se refirió al Comando y Control “que nos ha permitido abrirnos con los medios convencionales de la Fuerza Armada”, según dijo, a la vez que le daba la bienvenida y reconocimiento a la Milicia Nacional. Eso le agradó bastante a Maduro, quien sin formalidad alguna lo llamó “Padrino”. Desempolvar el uniforme de Comandante en Jefe, por parte de Nicolás Maduro, indica varias cosas, más allá de la reacción que causa al interior de la Fuerza Armada. Es un indicio de inicio al combate, quizá un mensaje a la institución castrense. Todo podría resumirse en que hay una tensa situación política y militar, ante la cual Maduro asume que puede comandar a la Fuerza Armada. MÁS SOBRE ESTOS TEMAS: El régimen de Maduro anunció que realizará ejercicios militares permanentes y por sorpresa: “No le tenemos miedo al combate”
