(Enviado especial a Italia). Tras el encuentro con el Papa, Alberto Fernández ratificó que enviará al Congreso un proyecto para despenalizar el aborto. Según trascendió, lo anunciaría el 1° de marzo, en su discurso para inaugurar las sesiones ordinarias. “Es un hecho. Cada uno tiene su posición sobre el tema y el Presidente no va a cambiar”, confirmó a Infobae uno de los integrantes de la delegación argentina que más conoce al primer mandatario. Fue una de las principales definiciones de una jornada plagada de gestos de cortesía entre ambos, aunque se produjo un equívoco entre el Vaticano y la delegación argentina acerca de la mención o no del polémico tema durante la reunión entre Francisco y el Presidente. Allí en donde pareció que el Papa había apelado a la diplomacia vaticana para marcar diferencias con Alberto Fernández sobre el aborto. Públicamente, en la conferencia de prensa tras la reunión, el Presidente fue concreto cuando le preguntaron acerca del proyecto sobre despenalización del aborto: “Voy a cumplir con mi palabra. Pero mi palabra no es volver a abrir una brecha entre pañuelos verdes y celestes. Mi palabra es darle la posibilidad a la mujer que si quiere abortar, lo pueda hacer legalmente. Y ayudar a los que quieran tener a sus hijos, a que los puedan tener. Es todo. Y ese va a ser mi trabajo”. Antes de esa definición, existía un acuerdo tácito: Alberto Fernández no plantearía su intención de despenalizar el aborto durante la reunión a solas en la Biblioteca Vaticana, y Francisco tampoco traería a la audiencia privada esa decisión de Estado que sin dudas tensará la relación institucional entre la administración peronista y la Iglesia Apostólica Romana. Y así sucedió: el Presidente y el Papa dialogaron durante 44 minutos y no destinaron un sólo instante a tratar un asunto laico que podría llegar al Congreso a comienzos de marzo. Pero el Vaticano ajustó la información oficial que había trasmitido el presidente argentino durante una larga conferencia de prensa. Esto es lo que dijo Alberto Fernández ante los periodistas: -¿Presidente, finalmente el tema del aborto surgió en las conversaciones con Francisco? -No. Hablamos mucho de la pobreza y le conté como era el plan de la pobreza... -¿Y con Parolín tampoco. . . ?, insistió un periodista, respecto a si el Presidente había hablado de la despenalización del aborto con el secretario de Estado Vaticano, Pietro Parolín. -Tampoco. -Disculpe la insistencia con el tema de la despenalización del aborto, pero hay mucha gente en la Argentina. . . -, le dijo otra periodista. -Eso ya lo hablé,-, contestó Alberto Fernández, sin esperar el final de la frase. La periodista esperó que terminara y completó su pregunta: "Pero se pensaba que en la inauguración de las sesiones ordinarias del primero de marzo, usted pudiera relanzarlo... -Yo ya lo hablé. Y voy a cumplir con mi palabra. Pero mi palabra no es volver a abrir una brecha entre pañuelos verdes y celestes. Mi palabra es darle la posibilidad a la mujer que si quiere abortar, lo pueda hacer legalmente. Y ayudar a los que quieran tener a sus hijos, a que los puedan tener. Es todo. Y ese va a ser mi trabajo. El Vaticano se enteró de las declaraciones presidenciales y emitió un comunicado desmintiendo a Alberto Fernández. “Durante las cordiales conversaciones, se expreso la satisfacción por las buenas relaciones existentes entre la Santa Sede y la República Argentina. Posteriormente, se examinó la situación del país, con especial referencia a algunos problemas como la crisis económica-financiera, la lucha contra la pobreza, la corrupción y el narcotráfico, la promoción social, y la protección de la vida desde su concepción”. El texto motivó una queja al Vaticano por parte de un miembro de la delegación argentina. Por eso intervino el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, para difundir un segundo comunicado para aclarar la confusa situación: “No todos los temas citados en el comunicado de prensa sobre la audiencia con el presidente de la República Argentina han sido afrontados en todas las conversaciones: algunos han sido examinados en el curso del encuentro con la Secretaría de Estado otros en el marco del encuentro con el Santo Padre”. Esta última versión del Vaticano fue confirmada por el secretario de comunicación de Alberto Fernández, Juan Pablo Biondi: “Nunca hablaron del aborto, Alberto no mintió en su conferencia de prensa. El tema fue planteado por el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Parolin, no por el papa Francisco, tal cual comentó el Presidente al terminar el encuentro”. El primer comunicado decía: “Durante las cordiales conversaciones, se expresó satisfacción por las buenas relaciones existentes entre la Santa Sede y la República Argentina. Posteriormente, se examinó la situación del país, con especial referencia a algunos problemas como la crisis económico-financiera, la lucha contra la pobreza, la corrupción y el narcotráfico, la promoción social y la protección de la vida desde su concepción. En este contexto, se señaló la importante contribución de la Iglesia Católica en favor de toda la sociedad argentina, especialmente de los sectores más vulnerables de la población”. “Sucesivamente en la conversación se abordaron también temas de interés común en ámbito regional”, concluye el comunicado, que, horas más tarde, fue complementado por la aclaración de Bruni. Luego de ver a Francisco, Alberto Fernández fue recibido por el cardenal Pietro Parolin. Seguí leyendo:
