Francia y Alemania anunciaron este sábado la suspensión inmediata de la exportación de armas a Turquía, cuyas fuerzas armadas se encuentran en medio de una ofensiva contra milicias kurdas en el norte de Siria que ha sido criticada por la comunidad internacional. El ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, dijo al periódioco Bild que “en el contexto de la operaciones militares ofensivas en el noreste de Siria” su gobierno no aprobará nuevos permisos para la venta de equipamiento militar que pueda ser usado en Siria por Turquía. El año pasado Alemania exportó armas a Turquía por un valor de 270 millones de dólares, casi un tercio del total de sus ventas. La relación comercial es histórica: Turquía ha utilizado por décadas fusiles de asalto, tanques y muchos otros sistemas de procedencia alemana. Actualmente aún utiliza fusiles Heckler & Koch G3 y 33E, ametralladoras MG3, Tanques Leopard 1 y 2, cañones antiaéreos Rheinmetall de 20 milímetros, camiones Mercedes Benz, aviones de transporte Transall C-160, submarinos Tipo-209, fragatas MEKO 200 entre otros. Horas después el Ministerio francés de Asuntos Extranjeros declaró que “a la espera del cese de esa ofensiva, Francia ha decidido suspender todos los proyectos de exportación de materiales de guerra susceptibles de ser empleados en la ofensiva en Siria”. "Esta decisión es de efecto inmediato”, asegura el comunicado. Tras la petición de París de organizar con rapidez una reunión de la coalición internacional contra el grupo terrorista Estado Islámicos (ISIS, en inglés) para abordar la continuación de estas operaciones, el país espera que el Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, que se reunirá el lunes en Luxemburgo, sirva para coordinar una postura común de sanciones. “Francia reitera su firme condena de la ofensiva unilateral iniciada por Turquía en el noreste de Siria. Esta ofensiva pone en tela de juicio los esfuerzos de seguridad y estabilidad de la coalición internacional contra Daesh (acrónimo en áraba para el ISIS)”, señaló el ministerio. Además, alertó de que la iniciativa turca tendrá “consecuencias humanitarias importantes” y atacó directamente la seguridad de los europeos. Turquía utiliza lanzadores de misiles MILAN y helicópteros Eurocopter AS532 Cougar y AS332 Super Puma provenientes de Francia, Francia y Alemania se unen así a la decisión anunciada ya los últimos días por Holanda y Noruega. Los cuatro son, junto a Turquía, aliados y miembros de las Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). El ministro de Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglou, defendió las acciones de su país tras los anuncios de Francia y Alemania. “La ofensiva es un asunto vital y una cuestión de seguridad nacional. No importan lo que hagan, sea un embargo de armas o algo más, sólo nos fortalece”, expresó ante la cadena alemana Deutsche Welle. Con la Operación “Primavera de la Paz” Turquía busca expulsar de la frontera con Siria a las fuerzas kurdas, a las que vincula a un grupo terrorista (PKK) con el que lleva peleando desde décadas. Al mismo tiempo, intenta frustrar las intenciones separatistas kurdas y reubicar en ese territorio a los más de tres millones de refugiados sirios que alberga en su territorio. Por el contrario las milicias kurdas YPG, que forman parte de la coalición SDF, han sido instrumentales en la lucha contra el grupo terroristas Estado Islámico (ISIS, en inglés) con ayuda de Estados Unidos, y ahora intentan defender el territorio que controlan desde 2015 en un intento de lograr mayor autonomía dentro de Siria. Con información de EFE y AFP
Francia y Alemania suspendieron la venta de armas a Turquía en medio de la ofensiva en Siria
Los países se suman a Holanda, Finlandia y Noruega, que ya había realizado anuncios similares tras manifestar su oposición a la campaña militar que Ankara lanzó el miércoles y la cual podría generar crear un crisis humanitaria en la región, ya convulsionada por la guerra civil que arrecia desde el 2011