Sin embargo, al despertar de la anestesia, fue la propia paciente, identificada como Magdalena Leguizamón, quien tomó conciencia de que los cirujanos le habían cortado la pierna sana, por lo que pasó a tener entonces las dos piernas amputadas. En la noche del martes, al rededor de las 22.30 horas, la jubilada sufrió un paro cardiorespiratorio en la clínica Ceni de Quilmes donde se encontraba internada. Resta saber si el fallecimiento es a raíz de la mala praxis. "Te voy a extrañar, te amo con todo mi corazón ", publicó la hermana de Magdalena Leguizamón confirmando la muerte. Mayra, la hija de la víctima, días atrás decidió realizar la denuncia por mala praxis y llevar la situación a la Justicia. La causa quedó a cargo de la Fiscalía Descentralizada de Berazategui. La operación que tomó trascendencia a nivel nacional se llevó a cabo el lunes 22 de julio a las 19 horas en el Sanatorio Berazategui. Duró entre 45 minutos y una hora y, según la familiar de la damnificada, el responsable de la cirugía, un traumatólogo de apellido Cardozo, le aseguró que todo había salido dentro de lo esperable. Le detalló que, como la infección se había expandido, hubo que cortar por encima de la rodilla de la pierna derecha. No es la primera vez que el Sanatorio Berazategui sufre duras críticas por la calidad de su atención. En el 2015, se creó el grupo de la red social Facebook "Cierre al Nuevo Sanatorio Berazategui", en el que diferentes personas realizaron denuncias públicas por la mala atención del centro de salud y el maltrato hacia los pacientes y desde los directivos hacia los propios empleados. Además, en el 2018, algunos vecinos de la Ciudad alertaron sobre el alto número de abuelos afiliados al PAMI que murieron en un corto período de tiempo dentro de la clínica.
Murió la jubilada a la que le habían amputado la pierna equivocada en una clínica de Berazategui
Magdalena Leguizamón sufrió un paro cardíaco mientras se encontraba internada en una clínica de Quilmes