La Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal no hizo lugar a una queja de la defensa del ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia, Oscar Parrilli, contra la decisión de la Cámara Federal porteña que había revocado su sobreseimiento en la causa que investiga si la AFI encubrió al narco Ibar Pérez Corradi mientras estaba prófugo de la justicia. La legisladora Graciela Ocaña denunció a Parrilli por no haber remitido un trabajo de sus subalternos de la Agencia Federal de Inteligencia con destino a las fiscalías que intervenían en la búsqueda del prófugo Pérez Corradi. Ese informe corroboraba datos brindados por un testigo ante la Gendarmería Nacional según los cuales había indicios concretos sobre el paradero del narcotraficante. Recibir newsletter Según estableció la investigación, cuando el personal de Contrainteligencia de a AFI recibió la información, los datos fueron internamente enviados a la Dirección de Administración de Asuntos Legales y Técnicos y al subdirector del organismo, Juan Martín Mena, el 16 de noviembre de 2015. Pero no pasó nada. En enero de 2016, la División Investigación Federal de Fugitivos del Departamento de Interpol de la Policía Federal, siguiendo las mismas pistas, concluyó que efectivamente el prófugo habría estado en lugares previamente señalados por el testigo de identidad reservada y corroborados preliminarmente en el informe de Contrainteligencia. Pero Pérez Corradi abandonó el lugar donde estaba residiendo. El narcotraficante fue finalmente detenido en junio de 2016. La saga judicial de esta historia es enrevesada. La denuncia de Ocaña fue investigada por el juez Ariel Lijo, que procesó a Parrilli en febrero de 2017. Luego la Cámara Federal lo revocó ante la supuesta falta de pruebas, Lijo decidió su sobreseimiento. Pero tras la apelación del fiscal Guillermo Marijuan, la Cámara volvió sobre sus pasos y anuló aquel sobreseimiento. Esa última medida es la que Parrilli recurrió ante la Casación, sin buena fortuna. Esta semana, la sala IV de ese tribunal, integrada por Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Javier Carbajo, rechazó esa apelación y le ordenó al juez que "que proceda con celeridad a cumplir con los objetivos que tiene la instrucción".
