La ceremonia central se inició cuando comenzó a sonar una alarma a las 9:53, hora exacta del atentado del 18 de julio de 1994, en la calle Pasteur 633, la sede de la AMIA reconstruida tras la explosión que mató a 85 personas. El primer orador fue el presidente de la mutual judía, Ariel Echbaum, quien pidió el apoyo internacional para que haya justicia en la causa: "Hezbollah es una organización terrorista que sigue activa en nuestro continente. Es importante que haya sido incluida en el registro de grupos terroristas. Es imprescindible que los países hermanos hagan lo mismo". "Mientras vivamos en la impunidad, el dolor permanece igual que en 1994", reclamó el titular de la AMIA, que en otro fragmento de su discurso recordó al fiscal Nisman: "Sabemos que fue asesinado por su labor en la causa AMIA. Es imprescindible que se haga justicia y los culpables sean enjuiciados". "Mientras eso no ocurra seguiremos presos del miedo, del horror y de la peor la peor frustración que puede tener una democracia, la impunidad", insistió Echbaum. Eichbaum estuvo acompañado por Sofía Guterman, madre de Andrea, una joven que murió en el atentado. "¿Por qué están libres y protegidos?", se preguntó durante su exposición respecto a los autores materiales e intelectuales. También responsabilizó a Irán y a los funcionarios que protegen a los terroristas que llevaron adelante la barbarie que diseminó dolor y tristeza en la sociedad argentina. "Sinceramente señora Cristina Kirchner, el memorándum con Irán fue una traición a 85 muertos, a sus familiares y a la sociedad toda. Con el terrorismo no se pacta, al terrorismo se lo denuncia. No es creíble que pactar con Irán haya sido una ingenuidad", enfatizó Guterman. En tal sentido, la mujer advirtió: "La firma del memorándum no se puede pensar como una decisión ingenua del gobierno argentino. Algún motivo espurio tuvo que haber tenido. Los asesinos andan sueltos. Muchos irán muriendo, pero libres. Eso nos impide descansar. Mientras sigan prófugos, no nos permitiremos el reposo". En la previa, y al convocar al acto, Eichbaum sostuvo que el "reclamo no cesará hasta que sean juzgados y condenados los responsables materiales e intelectuales de la masacre". En los días previos también hubo reclamos de justicia de parte del presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Jorge Knoblovits, y de otros representantes de la comunidad judía. Además, el 25° aniversario de la masacre llega precedido por un decreto del presidente Macri que dispuso crear un registro de acusados por terrorismo, que será confeccionado por el Ministerio de Justicia y en el que, se anticipó, será incluido el proiraní Hezbollah (Partido de Dios). En tanto, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dispuso que todas las sirenas de los cuarteles de bomberos, los patrulleros de la policía local y las ambulancias suenen al unísono a las 9.53. También habrá un acto en la Casa Rosada. Está previsto para las 18, con la presencia de Macri. Allí se presentará el libro "Justicia perseguirás", iniciativa del Congreso Judío Latinoamericano (CJL), que contiene reflexiones de líderes mundiales como Donald Trump (Estados Unidos), Angela Merkel (Alemania) y Jair Bolsonaro (Brasil). Asimismo, Memoria Activa, una de las agrupaciones que critica las investigaciones, realizará su propio acto, por la mañana, en la Plaza Lavalle, frente al Palacio de Tribunales. Habrá conmemoraciones también en otros lugares del país, como en Bahía Blanca, donde se hará un acto organizado por la Asociación Israelita y el municipio bahiense.
"Mientras vivamos en la impunidad, el dolor permanece igual que en 1994", reclamó el presidente de la AMIA a 25 años del atentado
El acto central por el ataque terrorista comenzó a las 9:53, con el sonido de la sirena que recuerda el momento preciso del atentado que provocó la muerte de 85 personas. El presidente Macri no está presente pero mandó a integrantes de su gabinete