El mail de Mauricio Macri, que la Casa Rosada envió a dirigentes y entidades, no despejó las dudas de Cristina Kirchner sobre el llamado al diálogo. No fue, siquiera, motivo de un análisis profundo, en el dispositivo K. La ex presidenta se instaló el fin de semana en El Calafate, breve retiro antes de su reaparición pública este jueves en la presentación, en la Feria del Libro, de "Sinceramente". Recibir newsletter Este lunes por la noche, Cristina voló de regreso a Buenos Aires. Luego resolvería si reaccionará -y cómo- a la carta de Macri. Una alternativa, que se barajó en su entorno, es responder el mail de Macri con otro mail, fijando posición crítica sobre cada uno de los 10 puntos. Un mail contra otro mail. Reply. Es lo que hará, según supo este diario, hará Roberto Lavagna Mediante ese recurso podría, además, marcar postura sobre un tema sensible: negar que esté en su norte declarar un default en un eventual tercer mandato presidencial. Lo hizo, antes, a través de Alberto Fernández y Axel Kicillof pero quizá lo exprese de puño y letra. Desde el principio, apenas trascendió el decálogo que Macri circuló a un puñado de referentes opositores, el kirchnerismo expresó su rechazo. Este lunes, luego de que el ministro del Interior Rogelio Frigerio confirmó -tal como había adelantado Clarín- que se convocaría a la ex presidenta, cerca de la la senadora se repitió la posición: no apoyar los 10 puntos que comparan con lineamientos del "Consenso de Washington". Cristina Kirchner en su banca del Senado, en diciembre pasado. Luego de la invitación pública, la duda giraba en torno a cómo sería el formato, en qué términos y con qué características. Pero el mail presidencial, dijeron a Clarin fuentes K, no aportó certezas. "Invita a expresarse sobre los 10 puntos" apuntó una fuente y agregó que no explica con qué dinámica. En la nota, Macri repite los diez puntos que el kirchnerismo anticipó que no está dispuesto a firmar aunque el texto de la Casa Rosada tampoco propone rubricar un documento. Agustín Rossi, jefe del bloque del FpV, dijo estar dispuesto a una mesa de diálogo con agenda abierta. Pero, en la misma línea que el Patria, dijo que no apoyaría ningún documento con los 10 puntos de Macri "así como están". Sobre ese punto, este lunes por la noche, cerca de Cristina aseguraban a este diario que no había una decisión tomada. El kirchnerismo buscó sacarle densidad al planteo aunque dirigentes del peronismo K admiten que la Casa Rosada logró recuperar iniciativa política con su propuesta de diálogo, donde involucró a Miguel Angel Pichetto y Juan Manuel Urtubey, aunque inicialmente despertó el rechazo de Sergio Massa y Roberto Lavagna. "Lo hicieron para tratar de dividir al peronismo y les salió mal", dijo un operador K a Clarín. De arranque se entendió como un movimiento desesperado de Macri y se juzgó incomprensible al PJ no K que aceptó "subirse a un gobierno que se hunde". Luego se elogió la reacción crítica de Massa y los diez puntos que difundió, por su lado, Lavagna. Este lunes, la posición "oficial" del cristinismo, fue clara: "Si nos invitan a firmar un documento que avala sus políticas no lo vamos a hacer porque Argentina necesita cambiar el rumbo".
