Cerro Porteño recibió a San Lorenzo en su estadio con un claro objetivo, sumar los tres puntos y ponerse a cinco de Olimpia, el puntero del campeonato, a tres fechas del final. Sin embargo, cuando el Ciclón ganaba 1-0 con un gol de Joaquín Larrivey y ya se ilusionaba con el triunfo, fue perjudicado con un grosero error arbitral y finalmente se tuvo que conformar con un empate. ¿Qué pasó? A los 28 minutos de la segunda parte, el uruguayo Sebastián Fernández remató desde fuera del área, el arquero llegó a desviarla y, tras estrellarse en el travesaño, picó a casi un metro de la línea de gol. Mientras Fernández se agarraba la cabeza por la chance perdida, el árbitro Christian Aquino, a instancias del asistente Diego Silva, insólitamente decidió cobrar gol. Luego del empate 1-1, el árbitro tuvo que permanecer más de 10 minutos en el campo de juego, acompañado por efectivos de seguridad, para evitar ser atacado por jugadores, integrantes del cuerpo técnico del conjunto local e hinchas. Y, tras abandonar el estadio, presentó una denuncia en una comisaría por agresiones. Con la igualdad Cerro Porteño quedó a siete unidades de Olimpia, con nueve puntos en juego. Roberto Nanni, manager de Cerro, expresó su bronca en la conferencia de prensa: "Si hay una figura hoy, fueron el línea y el árbitro. La verdad estamos dolidos. Seguiremos luchando y de mi parte decirle que estoy orgulloso de los jugadores. La verdad que este campeonato estuvo muy raro, pero seguiremos trabajando". Además, denunció que el árbitro le dijo a un jugador "No me culpen a mí que siempre estuvieron segundos".
