El juez Alejo Ramos Padilla ya tiene fecha para iniciar los peritajes a los celulares de Marcelo D’Alessio y Pedro Etchebest , es decir, del extorsionador y el empresario extorsionado que denunció toda la maniobra en la que involucró al fiscal Carlos Stornelli y al juez Claudio Bonadio . Comenzará mañana, 21 de febrero, y estará a cargo del Departamento Cibercrimen de la Prefectura. En el caso del empresario extorsionado, Etchebest, se trata de celulares que entregó cuando realizó la denuncia, en la que detalló toda la maniobra extorsiva y aportó audios con llamadas y mensajes de Whatsapp , capturas de pantalla, fotos y videos. Respecto a estos materiales, la cédula que recibieron las partes de esta causa informa que “ dicha prueba fue acompañada a través de actuación notarial y, en audiencia pública se procedió a la extracción de la información contenida en uno de los aparatos telefónicos, sin perjuicio de lo cual se habrá de proceder a la extracción de la información digital que en todos los dispositivos aportados pudieran obrar ”. Es decir, que el empresario Etchebest aportó todo certificado por un escribano , algo que no pueden decir de las fotocopias de los cuadernos con las que operan Stornelli y Bonadio facilitadas por el multipremiado Diego Cabot. En el caso de D’Alessio, son celulares que el juez Ramos Padilla obtuvo en varios procedimientos, uno previo y otro posterior a que se conociera públicamente la denuncia del empresario Etchebest. Los teléfonos de D’Alessio son los que pueden aportar mayor información de la que se conoce e impulsar la causa, ya que deberían contener tanto las conversaciones extorsivas con Etchebest (cuyo contenido, en gran medida, ya es público) como los diálogos con el fiscal Stornelli y otros personajes que parecen laterales en la historia pero tienen roles no menores: Rodrigo González y Carlos Liñani . Ambos aparecen en la segunda extorsión que se conoció en estos días, en la que estaba involucrada la familia Barreiro. Allí, se escuchó como Liñani extorsionó a los hermanos Pablo y Sebastián Barreiro para mejorar la situación judicial de su padre Ricardo, preso en la causa de las fotocopias de los cuadernos. En esas conversaciones, Liñani les aseguró que Gonzalez era la vía para negocias con Stornelli y Bonadio junto con D’Alessio. El inicio de las pericias a los celulares es un golpe a la estrategia de Stornelli, que ejecutó varias maniobras para entorpecer la investigación. Una, la operación con Elisa Carrio y Clarín con escuchas ilegales a ex funcionarios presos aportadas por el Gobierno. Otra, la denuncia de Stornelli a D'Alessio, para la cual se tomó 4 días desde que se desató este escándalo. Lo hizo en Comodoro Py, y no entregó su celular pese a que la denuncia cayó en el juzgado del Julián Ercolini . El juez Ramos Padilla le pidió a Ercolini la información del celular de Stornelli, pero Ercolini hizo una maniobra insolita: reclamó a Ramos Padilla que se corra del camino y le envíe la causa , todo sin conocer su contenido ya que esta en secreto de sumario. Al menos, como dice Rinconet, tuvo la delicadeza de no sobreseer a Stornelli antes de que la causa llegue a sus manos. El comienzo de este peritaje pondrá a Stornelli, Bonadio y buena parte de Comodoro Py mas que nerviosos. La pericia a los celulares fue ordenada por el juez Ramos Padilla el 11 de febrero, el primer día hábil después de que Horacio Verbitsky revelara este escándalo en El Cohete a la Luna. Estará a cargo del Departamento Cibercrimen de la Prefectura, y se realizará en la División Pericias de la Dirección de Inteligencia Criminal e Investigaciones de esa fuerza. Comenzará mañana a las 9 horas. El veedor del procedimiento (según la cédula, nombrado por sorteo) será Pablo Alberto Rodríguez Romeo , ingeniero en sistemas que tiene una consultora en seguridad informática llamara CySI. Según su página de Linkedin, es docente en el Instituto Universitario de la Policía Federal, de la especialización “Análisis del lugar del hecho”.
Comienza la pericia clave que complica al fiscal Stornelli y D’Alessio
El juez Ramos Padilla ordenó el peritaje sobre el celular de Marcelo D’Alessio, el extorsionador a nombre del fiscal de la causa de los cuadernos.